El envío de remesas por parte de migrantes colombianos ha sido fundamental en el proceso de reactivación económica en el país, luego de dos años de pandemia. Su aporte ha sido indispensable en el crecimiento de diferentes sectores, por lo que se convierte en un ingreso significativo.
Cuando los connacionales envían dinero a Colombia, se traduce generalmente en un incremento al consumo, al ahorro y en algunas ocasiones estos dineros se convierten en inversiones en finca raíz. Asimismo, estos recursos han servido para incrementar la demanda de combustibles y manufacturas, los dos sectores con mayor crecimiento, con el 55,3% y el 18,3%, respectivamente, según cifras del Banco de la República.
Para enero de este año, el indicador de remesas siguió al alza y registró el mayor ingreso desde el año 2000, con US$664,45 millones; en febrero se redujo el envío de dinero con US$647,26 millones.
Otro tipo de inversiones que están haciendo las familias con las remesas es la compra de vivienda.
Justo en el proceso de recuperar la economía y encaminar el país hacia el crecimiento que traía en el 2019, antes de la pandemia, se radicó en el Congreso de la República el Proyecto de Ley que permite facilitar el acceso a la vivienda para los colombianos residentes en el exterior.
Dicho proyecto está a la espera de conciliación en plenaria de Senado, para luego ser sancionado por la Presidencia y convertirse en ley. Juan David Vélez, representante a la Cámara por el Centro Democrático y quien ocupa la curul de los colombianos en el exterior, es el autor de esta iniciativa.
Inversiones
El representante dijo a EL NUEVO SIGLO, respecto a este proyecto, que “son muchos los colombianos residentes en el exterior que desean regresar a nuestro país y gozar de un buen retiro después de muchos años trabajando por fuera; ellos tienen el anhelo de regresar y contar con vivienda propia. El proyecto nace de la necesidad de lograr la inclusión de estos ciudadanos a la oferta institucional relacionada con la adquisición de vivienda, como la globalización de las líneas de financiación para acceso a vivienda o leasing habitacional”.
Sostuvo Vélez, sobre lo que le falta al proyecto para que sea ley, que “ya anunciaron la conciliación en Senado, la cual después de su aprobación terminaría así el trámite legislativo y solamente faltaría la sanción presidencial, que podría tardar máximo unos dos meses”.
De otro lado, en Colombia ya existen algunas entidades financieras que brindan la posibilidad a los migrantes colombianos de tener un crédito hipotecario. Con esta situación el representante dice que “se convertiría en política pública, pues lo que este proyecto establece es que las mismas entidades financieras impulsen y creen programas para fortalecer la cultura de ahorro e inversión en el país, a través de programas de crédito de vivienda, que permitan la inclusión financiera de la diáspora colombiana, es decir, que amplíen su oferta institucional, pero al mismo tiempo que las entidades que no tengan estos programas los creen, en beneficio de los colombianos en el exterior”.
Sostuvo a este diario que, “igualmente, con este proyecto de ley, las entidades financieras estarían obligadas a crear los mecanismos y herramientas para la apertura de cuentas por medios digitales y así facilitar la adquisición de estas a los colombianos en el exterior. Asimismo, el proyecto de ley establece que los colombianos en el exterior, puedan acceder a subsidios y coberturas para la financiación y adquisición de vivienda nueva o usada”.
Indicó el congresista, respecto al beneficio de la entrada de remesas a los colombianos, que “actualmente en las familias receptoras no existe la cultura de ahorro e inversión con estos dineros, por lo que en su gran mayoría están yendo al gasto corriente. No obstante, estos ingresos hoy en día sostienen gran mayoría de las familias colombianas como en gastos de educación, alimento y sostenimiento. Son un gran aporte para la economía del país y los gastos corrientes de las familias colombianas”.
Ahorro y vivienda
Sobre cómo ayudaría este proyecto a la reactivación económica del país, Vélez dijo que “en primer lugar, incentivaría el ahorro y particularmente la inversión en vivienda. Hoy en día las remesas se han convertido en el gasto corriente de las familias receptoras, y con este proyecto de ley se está incentivando la compra de vivienda, la bancarización de las personas para poder acceder a los créditos y a la modernización de los mismos canales de transferencias de las entidades financieras. Por lo anterior, no solo se estaría reactivando la economía, sino que se estaría fortaleciendo la oferta institucional de los mismos bancos tanto para los colombianos residentes en el exterior como para los nacionales”.
Adicionalmente, explicó que “con la implementación de estos canales y ofertas, habría un estímulo para el connacional para el envío de remesas, lo que terminaría fortaleciendo el ingreso y ahorro de las familias colombianas”.
Respecto a cuántos colombianos en el exterior serían beneficiados con esta iniciativa, de llegar a ser ley, manifestó que “actualmente, según datos de la Cancillería, se tiene conocimiento de 5,5 millones de colombianos viviendo en el exterior. La oferta sería para todos los ciudadanos y ese es el gran aporte de la ley”.
Sobre las cifras de la entrada de remesas en los últimos años, el representante sostuvo que “en el 2020, según datos del Banco de la República, se registró un ingreso de más de US$6.800 millones. En el año 2021 la cifra tuvo un incremento de más de un 22%, logrando alcanzar la cifra récord de US$8.597 millones. Incluso los datos del Banco de la República en los dos primeros meses de este año muestran un incremento con respecto al año pasado. Sin duda una excelente noticia y un aporte valioso de los colombianos residentes en el exterior”.
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Negocios
De otro lado, Yadira Olarte, una bogotana que vive hace más de una década en Madison, al norte de Estados Unidos, dijo que “el dinero que se gana en el exterior se triplica en Colombia y uno podría invertir más en el país de uno”. Respecto al Proyecto de Ley, asegura que “sería muy bueno porque se facilitarían las cosas para los migrantes”, además de los trámites con los bancos para solicitar cualquier tipo de crédito.
“Me gustaría invertir en una vivienda en Colombia e invertir en un negocio, y preferiría invertir en mi país, que en Estados Unidos. ¿Quién no sueña con tener una casa en su país?”, comentó.
Adicionalmente, está convencida de que con el dinero que envía normalmente a Colombia (US$300) para ayudar a su familia, podría pagar una cuota de un crédito de vivienda fácilmente.
Cifras récord
En el 2021 llegaron al país aproximadamente US$8.597 millones en remesas, en su mayoría de Estados Unidos, según el Banco de la República, esta cifra representa un crecimiento del 24,4% respecto a la registrado en el 2020, de US$6.908 millones.
Por su parte, al Valle del Cauca llegaron US$2.308 millones en el año, siendo así el departamento que tuvo más ingresos de remesas durante el 2021, seguido de Antioquia y Cundinamarca, dentro del cual se incluye Bogotá, con US$1.516 millones y US$1.431 millones, respectivamente.
Estados Unidos, con el 50% de la población extranjera colombiana, fue el primer país en envío de remesas a Colombia con US$4.435 millones, es decir, el 51,5%; le sigue Europa con US$1.256 millones; el tercer lugar lo ocupa Chile, con un total de US$507 millones.