Una notificación del agente liquidador de la EPS Comparta en liquidación, a varios hospitales de los departamentos en donde operaba para que les devuelvan los recursos por concepto de los servicios extramurales que la prestadora de salud pagó en contratos bajo la modalidad de capitación durante el año 2020, causó malestar en los centros de salud públicos.

Señalan que solo en los hospitales de Santander, el liquidador de Comparta pretende cruzar la cartera que adeuda a las ESE, que asciende a $34.200 millones, con los descuentos unilaterales enviados por la entidad. La decisión afecta a todos los hospitales públicos de 38 municipios.

Nancy Cañón, directora de la Asociación de Hospitales Públicos de Santander, dijo que “lo que no tuvo en cuenta Comparta es que el Ministerio de Salud ordenó que, por encima de las cuentas, las facturas y los dineros pagados por anticipado, estaba la vida de los profesionales y del personal de apoyo de la salud, los que por disposición de las autoridades, dentro del marco de la cuarentena extrema, no podían tener ningún contacto con la comunidad, distinto al de los servicios médicos para salvarle la vida a los ciudadanos en los centros médicos, por lo que las labores de prevención y promoción quedaron prohibidas”.

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Para subsanar la situación, el mismo Ministerio de Salud dispuso que los prestadores deberían conciliar con las EPS, para reponer esas metas en el 2021, decisión en la que los directivos de los hospitales públicos estaban plenamente dispuestos a compensar, pero Comparta entró en liquidación porque no cumplió con las exigencias y los requisitos legales, especialmente relacionados con margen de solvencia y equilibrio financiero, lo que la obligaba a salir del mercado.

“Fue entonces cuando el agente liquidador de la propia Superintendencia Nacional de Salud ordenó glosar las facturas y emplazar a los hospitales para que le devuelvan la plata y además cobra los máximos intereses de mora posibles. Curiosa decisión, cuando el país es testigo de que casi todas las EPS en liquidación terminan por nunca pagar sus deudas a los prestadores. Es decir, esa plata sí se pierde, pero en este caso, la EPS Comparta en liquidación pretende una excepción, pero al revés”, puntualizó la vocera del gremio de los hospitales de Santander.

Lo mismo ocurre en Boyacá y Córdoba en donde la cartera de estos departamentos asciende a $56.687 millones y $16.677 millones, respectivamente.