Un coche bomba estalló este domingo frente a una comisaría en la ciudad turca de Gaziantep, cerca de la frontera con Siria, dejando dos policías muertos y 22 heridos.
Por otro lado, tres soldados fallecieron en una emboscada en la región de mayoría kurda en el este del país, donde el ejército lleva a cabo una operación militar contra los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
Los ataques se produjeron en un contexto de tensiones. Las fuerzas de seguridad se desplegaron ampliamente por todo el país el domingo con motivo de las tradicionales manifestaciones del 1 de mayo organizadas por la izquierda turca y los militantes sindicales, que a menudo se saldan con enfrentamientos con la policía.
En un comunicado publicado por la agencia gubernamental Anatolia, la oficina del gobernador regional de Gaziantep, Alí Yerlikaya, indicó que un policía había sido abatido y que 23 personas habían resultado heridas, incluyendo 19 policías. Otro policía murió víctima de las heridas.
Según el comunicado, la explosión fue provocada por un coche bomba, pero no se precisaba la identidad de los autores del atentado.
Según la cadena de televisión NTV, se produjeron enfrentamientos con las fuerzas de seguridad tras la explosión y se escucharon disparos.
Las imágenes de las cámaras de seguridad que difundieron los medios de comunicación turcos mostraban el momento en el que estalló la bomba frente al portal del edificio de la policía, y escenas de caos mientras las ambulancias llegaban para evacuar a las víctimas, que yacían esparcidas por el suelo.
Gaziantep, fronteriza con Siria, cuenta con casi 1,5 millones de habitantes y ha acogido a un gran número de refugiados sirios.
La ciudad está considerada como vulnerable a los ataques del grupo yihadista Estado Islámico (EI), que controla vastos territorios en la frontera con Turquía.
Además, el domingo también resultaron heridas otras cuatro personas en la ciudad fronteriza de Kilis, al sur de Gaziantep, por cohetes procedentes de una zona controlada por el grupo EI en Siria, según Anatolia. Kilis suele ser blanco de este tipo de ataques, que a menudo dejan víctimas mortales.
La agencia agregó que, tras haber dirigido vuelos de reconocimiento con drones, la artillería turca había bombardeado posiciones del grupo EI en represalia, causando nueve muertos en las filas yihadistas.
- Una oleada de atentados -
El atentado de Gaziantep se produjo tras una oleada que sacudió al país en marzo y que dejó decenas de muertos. Dos de ellos, ocurridos en Estambul, fueron atribuidos a los yihadistas mientras que otros dos, cometidos en Ankara, fueron reivindicados por militantes kurdos.
El miércoles, un kamikaze, vinculado a los rebeldes kurdos, según la prensa turca, se inmoló en una zona turística de la ciudad de Bursa (noroeste), hiriendo a trece personas.
Más al oeste de Gaziantep, tres soldados murieron y otros 14 resultaron heridos este domingo en un ataque en el distrito de Nusaybin, en la provincia de Mardin, donde el ejército dirige una operación militar contra el PKK.
El ejército acusó del mismo al "grupo terrorista separatista", término que emplea para desginar al PKK sin nombrarlo.
Según la agencia de prensa Dogan, los rebeldes turcos dispararon cohetes contra una unidad de desminadores del ejército.
El jefe militar del PKK, Cemil Bayik, dijo hace una semana que el grupo estaba listo para "intensificar" los combates contra las fuerzas de seguridad turcas, y acusó al presidente turco Recep Tayyip Erdogan de provocar una "escalada".
Tras más de dos años de tregua, el conflicto kurdo se reanudó en el verano (boreal) pasado, marcando el fin de las conversaciones de paz iniciadas en el otoño de 2012 entre el gobierno turco y el PKK para poner fin a una rebelión que ha dejado 40.000 muertos desde 1984.