El presidente Donald Trump nombró este viernes a un nuevo director de comunicaciones de la Casa Blanca, en una tentativa de recuperar la imagen pública de su gestión, pero su decisión provocó la inmediata renuncia del portavoz, Sean Spicer.
Trump nombró como nuevo jefe de comunicaciones a Anthony Scaramucci, un ejecutivo de un fondo de inversiones de 53 años, informó una fuente de la Casa Blanca a la AFP.
Por el momento, la presidencia no emitió un comunicado oficial sobre el nombramiento.
Scaramucci fue visto la mañana del viernes en la sede presidencial, preparándose para hablar al personal. El puesto estaba vacante desde mayo, cuando Michael Dubke entregó su carta de renuncia alegando "motivos personales".
Sin embargo, el nombramiento de Scaramucci provocó otra crisis en la Casa Blanca: de acuerdo con la prensa local, Spicer presentó instantáneamente su renuncia, en desacuerdo con la decisión del presidente.
Desde la salida de Dubke, Spicer había asumido interinamente esas funciones.
En la estructura de la Casa Blanca, la oficina de Scaramucci es la que diseña la estrategia de comunicaciones de la presidencia, aunque el portavoz es el rostro visible encargado de aplicar esa línea comunicacional.