Deserción educativa es un reto para el Distrito | El Nuevo Siglo
Martes, 8 de Noviembre de 2011

Si bien el sector educativo siempre ha tenido logros importantes, al avanzar en diferentes estrategias como la gratuidad en la educación, subsidios condicionados, transporte escolar y alimentación, entre otros, la reducción en las tasas de deserción continúa siendo uno de los grandes retos para la Secretaría de Educación del Distrito.

Los ojos deben centrarse principalmente en los estudiantes de grado 8º a 11º, quienes, en los últimos siete años, han venido renunciando a la posibilidad de culminar su proceso educativo.
Preocupa también la situación de los estudiantes de preescolar, quienes han  llegado a registrar tasas de deserción del 3,5, un nivel alto si se tiene en cuenta que los más pequeños están iniciando su vida escolar.
Así lo revela el informe de la Veeduría Distrital, “Cómo Avanza el Distrito en Educación”, al agregar que la tasa promedio de deserción en todos los grados aumentó al pasar del 3,2 por ciento al 3,7, situación contraria a la de los colegios no oficiales que lograron disminuir la cifra del 2,2 al 1,4 por ciento.
Por eso, ad portas de que finalice el año lectivo, la Veeduría Distrital le pide a la Secretaría de Educación que revise, para el próximo año, aquellas causas de oferta y demanda que están generando los altos índices de abandono, especialmente en la educación básica secundaria y media.
Como parte del informe, la Veeduría Distrital les preguntó a padres y alumnos las razones del retiro, a lo que el 58 por ciento respondió que no les gusta el colegio, el 21 por ciento dijo tener que repetir el curso y el 17 por ciento manifestó necesidades de trabajar.
El informe del ente de control también reveló que los colegios distritales avanzan cada vez más en las pruebas de estado, pues el porcentaje de los colegios que se ubicaron en la categoría superior o muy superior aumentó en los últimos cinco años, al pasar del 4 al 8 por ciento. Para la categoría alto, también hubo un importante avance, al pasar del 25 por ciento en 2005, a representar el 34 por ciento en 2010.
De acuerdo con el documento, hay un esfuerzo importante en el acceso a la educación de la población más vulnerable. Muestra de ellos es que la matrícula de la población sisbenizada pasó del 30 por ciento en 2004 al 54 por ciento en 2010. Así mismo, la población en condición de discapacidad y víctimas del conflicto alcanzaron el año pasado el 3,6 de la matrícula total.