Luego de dos años de labores investigativas adelantadas por la Fiscalía, en conjunto con uniformados de la Dijin-Grues, fue desarticulada una red dedicada al comercio de anfetaminas y drogas sintéticas en Cali y Buga (Valle), San Andrés y Providencia, así como en Ecuador, Chile, Panamá, Estados Unidos y otros países de Europa.
Con las órdenes de captura emitidas por los Juzgados 78 y 41 Penales Municipales, con función de control de garantías de Cali, el pasado 18 de abril se llevó a cabo el operativo en el que se materializaron 13 aprehensiones en las últimas horas.
Según lo establecido en el proceso, la estructura delincuencial organizaba fiestas en Cali, Buga, Lago Calima y otros sectores turísticos en el Valle del Cauca, e inclusive estaba incursionando con esta modalidad delictiva en San Andrés y Providencia; donde vendía las anfetaminas a domicilio.
Se determinó además que entre la droga que comercializaban estaba la llamada 2cb o cocaína rosada, cuyo costo por gramo era de $150.000, aproximadamente.
Por medio de interceptaciones telefónicas (aproximadamente 50 líneas), búsquedas selectivas en bases de datos, vigilancia y seguimiento a personas, e inspecciones judiciales, también se estableció que la organización había participado en 10 eventos en Medellín y Rionegro (Antioquia), Cali y San Andrés Islas, en donde hubo incautación de anfetaminas.
En esos hechos fueron capturadas dos personas que actualmente están condenadas a 10 años de prisión. De igual manera durante la investigación fueron incautadas aproximadamente 1.000 dosis de anfetaminas en diferentes modalidades, pastillas, LSD y Popper, entre otras.
Estas personas utilizaban pastillas de Rivotril compuestas por clonazepan del grupo de los llamados ansiolíticos o anticonvulsionantes que son usadas en la medicina en tratamientos neurológicos.
Los capturados en Cali (Valle del Cauca), Ipiales (Nariño), Medellín (Antioquia) y San Andrés Islas, cumplían diversas funciones dentro de la estructura criminal como coordinadores de entregas a domicilio, encargados de los envíos a otros países a través de correos humanos o empresas de mensajería, almacenistas del estupefaciente o recolectores del dinero producto de la comercialización de la droga.