El australiano Ben O'Connor (NTT) conquistó la 17ª etapa del Giro de Italia, este miércoles en la estación de Madonna di Campiglio, en el norte del país.
El portugués Joao Almeida (Deceuninck) conservó la maglia rosa de líder de la general, un día antes de la etapa reina, con la subida al Stelvio, uno de los puertos más altos de Europa con sus 2.758 metros de altitud.
Un día después de su segundo puesto en San Daniele del Friuli, donde fue superado en el último kilómetro por el esloveno Jan Tratnik, O'Connor no tardó en tomarse su revancha.
El australiano superó por 31 segundos al austríaco Hermann Pernsteiner, un compañero de Tratnik, y en más de un minuto al belga Thomas De Gendt.
En esta etapa de 203 kilómetros con cuatro ascensiones destacadas en el recorrido, una escapada de 19 corredores desató las hostilidades. Un grupo tomó la iniciativa para abordar la subida final (12,5 kilómetros al 5,7%) con menos de seis minutos de ventaja.
O'Connor se escapó a 8,8 kilómetros para meta, con un trío perseguidor formado por De Gendt, Pernsteiner y Zakarin.
De los tres, Pernsteiner se mostró más ambicioso pero cedió tiempo en la subida a Madonna di Campiglio.
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De 24 años, O'Connor se dio a conocer en 2018 cuando ganó una etapa de montaña del Tour de los Alpes por delante de Thibaut Pinot. Este miércoles logró su primer triunfo en una gran vuelta.
Más allá de pequeñas escaramuzas sin consecuencias, los favoritos guardaron fuerzas la víspera de la etapa reina de esta edición del Giro.
El jueves, en efecto, el Giro ofrecerá su última oportunidad en alta montaña, tras oficializarse la supresión de los puertos Agnel y el Izoard, en el programa de la 20ª etapa el sábado, debido a las restricciones por el coronavirus.
Entre Pinzolo y los lagos de Cancano (207 km), la carrera escalará el Stelvio, el punto más alto de esta edición.
En su cumbre quedarán por delante 37 kilómetros, un largo descenso y la subida final de 8,7 kilómetros con el 6,8 de pendiente media.