La tensión y la agresividad se tomaron las páginas y el corazón de la afición nacional en un encuentro de alto calibre con Chile. Los visitantes, que fueron más, terminaron eliminados por diferencia de gol pero con un nivel digno de admirar que promete y genera respeto.

Con suspenso, sufrimiento y un Chile de gran nivel finalizó un partido de infarto en el que la tricolor terminó pidiendo tiempo por los constantes ataques de los australes. El encuentro se desarrolló como los visitantes quisieron. Colombia aguantó pero ayer estuvo lejos de su mejor versión y el cuerpo técnico en cabeza de Arturo Reyes no supo qué hacer pues la roja le robó el control de la pelota y manejó el duelo con explosividad y un ímpetu enorme.

En un encuentro de alto calibre la tricolor aseguró su tiquete a la siguiente fase y aún tiene en la mira el viaje rumbo a Tokio. Con Nicolás Benedetti como capitán, Colombia mantuvo el empate con Chile en el estadio Hernán Ramírez Villegas de Pereira y acompañará a Argentina a la última etapa del campeonato que se disputará en Bucaramanga la próxima semana.

Los de Arturo Reyes en un principio salieron a ganar el partido pero como era de esperarse Chile se comportó como un rival que no dejó las cosas para nada sencillas. La capacidad de los australes para salir a la contra y robar balones causó más de un inconveniente defensivo que solventó el guardameta de Equidad, Esteban Ruiz, quien afortunadamente guardó el 0-0 que le otorgó a la tricolor el boleto al cuadrangular por diferencia de gol.

Bernardo Redín, entrenador de los chilenos, estudió muy bien a Colombia y dejó marcaje personal sobre Nicolás Benedetti y Jorge Carrascal, volantes creativos de la tricolor que no tuvieron mayor espacio en un encuentro que terminó siendo de ida y vuelta. Con algo de suspenso en el transcurso del duelo, los locales lograron sobrellevar la férrea presión de los rojos y aguantaron resguardados en su área para evitar un tanto que les diera a los visitantes un motor anímico.

Por su lado, es importante mencionar que Chile no finalizó de mala manera el campeonato. Los australes demostraron que cuentan con capacidades suficientes para organizar un sistema desde la parte física. A lo largo del certamen, el plantel se mostró como una escuadra muy bien trabajada, en especial en el fondo. Quizás el tema del promedio de estatura afectó un poco el manejo de las pelotas quietas, no obstante, la velocidad de los delanteros junto con la garra de los recuperadores le brindan un plus en cada balón que disputan.

Por su parte, Argentina derrotó categóricamente a una Venezuela venida a menos desde el partido que perdió ante la tricolor. El encuentro quedó 4-1 en favor de los albicelestes, mismos que se verán las caras con los muchachos dirigidos por Reyes.

A toda máquina

Si las cosas no estuvieron fáciles para Colombia en la primera fase del torneo, el cuadrangular final no será un trabajo suave. Tanto Brasil como Argentina llegan a la última etapa del campeonato a toda máquina. Ambos planteles ganaron los cuatro encuentros que disputaron con una diferencia superior a dos goles en cada choque que participaron.

Por supuesto, Brasil es el favorito a quedarse con la presea dorada del Preolímpico, sin embargo, la albiceleste no está muy lejos y demostró ser un equipo aguerrido que quiere dar la pelea por el primer puesto. Figuras como Reiner en el conjunto carioca y Mac Alister en Argentina pretenden sorprender más en suelo cafetero en un cuadrangular que promete ser de infarto por el desempeño de los equipos que lo integran.

El último cupo por el cuadrangular lo disputarán Bolivia, Paraguay, Uruguay y Perú hoy. Los charrúas de momento están en la segunda plaza del bombo, no obstante, los guaraníes siempre son una escuadra que sale con todo a chocar desde el primer minuto y luchará con uno de sus máximos rivales en la zona Conmebol.

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Edwin Cetré, mediapunta del Junior, cumple un gran papel en la Selección de Arturo Reyes. /Fedefútbol