El Manchester City ganó su tercera Copa de la Liga inglesa consecutiva, la cuarta en cinco años, al derrotar por 2-1 a Aston Villa, este domingo en el estadio londinense de Wembley, gracias a los goles del argentino Sergio Agüero (20) y del español Rodrigo Hernández (31).
El tanzano Mbwana Samatta (41) acortó diferencias para el Aston Villa, pero el equipo de Birmingham, cuyo último título en su palmarés había sido precisamente una Copa de la Liga en 1996, no pudo evitar el triunfo de los Citizens, que han ganado seis de los últimos siete títulos disputados en el fútbol inglés.
En una temporada marcada por la pérdida casi ineludible del título de Premier League, que tiene casi ganado el Liverpool, y su exclusión de las Copas de Europa por dos años, por violación de las reglas del Fair-Play Financiero, los Citizens no dejaron pasar su oportunidad de dar una alegría a sus aficionados en esta temporada cruel.
La superioridad del City fue incontestable, pero su segundo gol, finalmente decisivo, fue marcado tras un córner que no debió haberse concedido, y Aston Villa estuvo cerca del empate en los últimos minutos, con un cabezazo del belga Bjorn Engels, rechazado por el guardameta chileno del City, Claudio Bravo, cerca de uno de los postes (88).