El velatorio de Diego Armando Maradona se convirtió este jueves en un caos en los aledaños de la Casa Rosada, sede del Gobierno argentino donde se celebrada el homenaje, por el enfrentamiento entre Policía y aficionados, en una escalada de tensión que terminó suspendiendo el último adiós al mito fallecido el día anterior.
La despedida pública a Maradona transcurría sin incidentes pero, con previsión de que la jornada terminara a las 16 horas, comenzaron los nervios. Miles de personas aún hacían colas de varios kilómetros para entrar al velatorio, situado en uno de los salones de Balcarce 50, y se produjeron entonces los primeros altercados.
La Policía comenzó a establecer cortes que aún tendrían tiempo de entrar y comenzó la disputa entre los aficionados y los cuerpos de seguridad en los alrededores de la Plaza de Mayo y zonas aledañas. Según informa TyC, la Policía ha cargado con balas de goma, tanque de agua y gases lacrimógenos. Una parte de la inmensa multitud ha respondido con el lanzamiento de piedras y botellas, en especial en la intersección de Avenida de Mayo con 9 de julio.
Por momentos se decidió que darían tres horas más al velatorio, hasta las 19 horas, pero la creciente situación de caos en las calles y a las puertas de la sede del Gobierno obligó a las autoridades a cerrar la Casa Rosada, con gente intentando colarse por las ventanas y otras puertas, y suspender el velatorio hasta nuevo aviso. Mientras los enfrentamientos continúan, se traza ya el plan de traslado del féretro al cementerio Jardín de Bella Vista.