La falta de voluntad política de la autoridad ambiental, sobrecostos en los proyectos de siembra, el mantenimiento del arbolado, la tala indiscriminada; el Sistema de Información para Gestión del Arbolado Urbano (Sigau) no es confiable, así como las deficiencias en el manejo del vivero La Florida y el  descuido del arbolado. Fueron las cusas por las que no se cumplieron las metas del anterior Plan de Desarrollo.

Estas anomalías presentadas en la administración anterior en el Jardín Botánico y la Secretaria Distrital de Ambiente, fueron denunciadas por el Concejal ambientalista de Bogotá, Roberto Sáenz en debate de control político donde demostró que se configuró “el carrusel del hueco” que ha perjudicado el buen desarrollo técnico del arbolado urbano.

Otro de los sustentos del Concejal ambientalista es que en dos informes de auditoría realizados por la Contraloría de Bogotá evidencian dos nuevos hallazgos fiscales por 1.104 millones de pesos.

En el Jardín Botánico se halló un detrimento patrimonial de 498 millones de pesos en la celebración de contratos de urgencia manifiesta y donde la interventoría indicó que la Unión Temporal “Un pulmón para ti”, no identificó los árboles que no cumplían los fines de la declaración de urgencia manifiesta Resolución 388 de 2011 JB y no se realizó la labor para la que fueron contratadas las uniones temporales.

Las propuestas del Concejal Roberto Sáenz tienden a implementar el Banco de Semillas y viveros comunitarios en zonas de transición; reglamentar el tema de arboles patrimoniales y de interés público; actualizar el Sigau y armonizarlo con los diferentes sistemas de información ambiental del Distrito; establecer un sistema de costos para siembra y tala de árboles en la ciudad; promover la participación ciudadana y las organizaciones sociales en torno a la defensa y consolidación del arbolado capitalino; articular los planes locales de arborización urbana al plan distrital; impulsar la investigación científica y aplicada en torno al arbolado urbano y la jardinería urbana (techos verdes, jardines verticales, entre otros) y su incidencia en la mitigación del cambio climático.