Fue anulado el registro del acto de compraventa entre el “asilos de locos, de locas, de indigentes mujeres y mendigos varones” y el Hospital San Juan de Dios de Bogotá, tras establecer que dicho acto de registro de la venta es ilegal, así lo determinó la Oficina de Registro e Instrumentos Públicos de la zona sur de la ciudad de Bogotá, respondiendo las peticiones elevadas por la Procuraduría General.
Al declarar la nulidad del acto de compraventa la situación jurídica del inmueble cambió y, en consecuencia, las edificaciones construidas en el terreno del Hospital San Juan de Dios “nunca fueron transferidas legalmente a la extinta Fundación San Juan de Dios y por ende no pueden conformar la masa de liquidación del conjunto de derechos y obligaciones de dicha fundación, ni puede disponer legalmente de este”.
La resolución expedida por el registrador principal de la Oficina de Registro e Instrumentos Públicos Bogotá Zona Sur, agrega que este inmueble y sus edificaciones pertenecen al departamento de Cundinamarca y este es el único facultado para venderlo, conforme a la autorización que expida el Ministerio de Cultura.
Ante esta decisión el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro aseguró que es un nuevo intento para evitar que se reabra uno de los símbolos de la medicina en la ciudad.
“¿Por qué lo hace? Pues indudablemente porque somos nosotros los que queremos abrirlo y podemos, e indudablemente y más allá, porque el San Juan de Dios es un símbolo, y los símbolos en la acción política y social son muy poderosos”, dijo Petro.
Además, explicó que el registrador decidió borrar todas las anotaciones de registro del Hospital desde el año 1924 hasta la fecha, lo cual se constituye como una acción fuera de la ley.
“¿Hasta qué punto llega la histeria de un grupo de personas que por sectarismo y odio político, porque no tiene otra explicación, llegan a infringir la ley que prohíbe a un registrador anular anotaciones a menos que sea por orden judicial? Este expropió”, aseguró el mandatario.
Además, dijo que el magistrado que hoy tiene la responsabilidad de definir si el esquema de aseo en la ciudad de Bogotá es legal o no, ha tomado varias decisiones en contra de la administración Distrital, lo cual demuestra el poder de las fuerzas que se oponen a una verdadera democracia en Colombia.
“El que fue candidato a fiscal en la terna del presidente Uribe, el magistrado Marcos Velilla, que ayudó a suspender el Plan de Ordenamiento Territorial de la Bogotá Humana, que votó por la destitución y por anular la medida cautelar que protegía al alcalde Mayor de la ciudad, es hoy el ponente la decisión sobre si el decreto de aseo es legal o es ilegal”, afirmó Petro.
El Alcalde cuestionó esta situación y aseguró que entre más éxito logra socialmente Bogotá Humana, más peligros se van construyendo para intentar cerrar los caminos a gobiernos alternativos en Colombia.
“¿Por qué razón? ¿Para hundir el decreto que permite la remuneración de los recicladores, que es uno de los factores que ha permitido la justicia social en la ciudad de Bogotá o para ayudar a preparar las condiciones que permitan el anulamiento legal, jurídico de una alternativa en Colombia?”, se preguntó Petro.