El permiso remunerado de cinco días de la presidenta de la Corte Suprema, Ruth Marina Díaz, no termina de generar rechazo.
A pesar de las explicaciones de la magistrada, para varios sectores no existen razones para que en pleno calendario laboral los altos funcionarios tomen permisos pagos sin plena justificación.
En este sentido, para la representante por Bogotá, Alba Luz Pinilla, del Polo Democrático, la magistrada Díaz pudo haber pedido permiso no remunerado, ya que al no hacerlo obligó al Estado a unos pagos que están prohibidos.
“Todo los trabajadores tienen tres días de permiso por calamidad doméstica, pero no para pasear. El Estado no puede estar pagando permisos de vacaciones o de cumpleaños, eso está totalmente prohibido. Esperamos que la investigaciones apunten a que haya sanciones independientemente de la investidura que puedan tener para obtener estos beneficios”, sostuvo Pinilla.
“Es un mal ejemplo porque ellos tienen la posibilidad de pedir permisos no remunerados. Este tipo de permisos se pueden tomar, pero la cuestión es que son permisos que son remunerados y allí se podría estar incurriendo en laguna falta”, recalcó.
Díaz explicó que hizo uso del permiso que me permite el artículo 144 de la Ley 270 de 1996 y que a pesar de estar de descanso trabajó durante el paseo, ya que estudió varios proyectos: “Durante el crucero, pese a que era de descanso, estudié los proyectos de casación presentados por mis compañeros de la Sala Civil, y revisé el proyecto que dejé listo para repartirles el lunes 20 de mayo, los cuales serán examinados por la Corte la próxima semana”.
Díaz indicó que su trabajo se encuentra al día y que hoy estará trabajando desde las 7 de la mañana hasta las 10 de la noche como lo hace todos los días.
“El trabajo que me corresponde como magistrada se encuentra al día, como lo pueden verificar quienes así lo soliciten”, anotó.