Pese al mal comportamiento de algunos hinchas que no entienden que el fútbol es un juego, una diversión, la Liga Postobón volvió a brindar emociones a granel, para algunos, y para otros, a acrecentar sus preocupaciones.

Para los que la séptima jornada resultó altamente positiva, están Millonarios, a pesar del susto que se llevó ante Huila, pero al que al final venció 3-2, con lo que hoy es segundo, detrás de Nacional que sigue sumando a domicilio y que esta vez superó por la mínima diferencia a Junior.

En el caso de los azules, Dayro Moreno volvió a marcar en dos ocasiones, Leudo lo hizo en otra, mientras que por Huila convirtieron Páez y el uruguayo Zamora.

Millonarios se encontró con un rival complicado y que estuvo a punto de llevarse el empate, que le hubiera sido muy útil si se tiene en cuenta que el cuadro opita anda refundido en la tabla de posiciones y del descenso.

Por su parte, Junior sumó su segunda derrota en línea y dos partidos sin anotar gol. Nacional completó 16 puntos, gracias al gol de Sherman Cárdenas.

Los paisas, orientados por Juan Carlos Osorio, se mantienen invictos en el torneo y además, tienen partidos pendientes, con lo que pueden aumentar su ventaja frente a los demás en el torneo.

Con un triunfo frente a Quindío, Patriotas continuó su ascenso en el certamen y de paso se aleja de los puestos de descenso y de promoción.

El juego inició con dominio del equipo de casa que desde el pitazo inicial puso las condiciones y con volumen ofensivo llevando a su rival tras las cuerdas, llegó con riesgo sobre el área de Julián Viáfara a través de los remates de Maximiliano Brito, Jonathan Estrada y José Luis Trancredi, pero estos no tuvieron la dirección deseada y las oportunidades de abrir el marcador se iban perdiendo.

Deportivo Cali se encontró con un rival muy complicado, que le enredó el partido hasta más no poder, Itagüí, pero al final lo venció 1-0, con gol de Carlos Lizarazo.

Sin goles terminó el duelo entre Medellín y Pasto, en un partido en el que el visitante estuvo más cerca de anotar y en el que el local volvió a denotar falta de actitud.

Medellín sigue sin convencer, perdido en el sector defensivo, complicado en el mediocampo y sin contundencia en el ataque. Para colmo de males, sus aficionados siguen recurriendo a la violencia, al punto de que fue necesaria la utilización de gases lacrimógenos para controlarlos, lo que afectó el normal desarrollo del partido.

Pero no fue éste en el único juego donde hubo desmanes. En Cali, los hinchas del cuadro azucarero protestaron porque el equipo no jugó en su estadio, sino que lo hizo en el Pascual Guerrero.

Otro partido que concluyó con empate fue el disputado por Envigado y Chicó. Los visitantes estuvieron arriba en el marcador, pero un gol de Diego Álvarez en los últimos minutos le dio la paridad a los Naranja en su casa.

El torneo Finalización del fútbol profesional colombiano está emotivo por donde se le mire, con un Nacional que mantiene el nivel que lo llevó al título en el Apertura, un Millonarios que volvió a la senda del triunfo, de los goles y de la seguridad defensiva, así como con un Santa Fe que ayer tuvo fecha libre pero que sigue siendo gran animador.

Hay otros equipos que también están haciendo su aporte para que el torneo gane en emoción en la parte alta de la tabla, como Patriotas, por ejemplo, o Itagüí, mientras que en el fondo, Quindío ya parece resignado a irse al descenso y para colmo de males, a la falta de gol que padece, se suma su mala puntería a la hora de ejecutar penas máximas.

Hoy otro elenco que está en la disputa por evitar el descenso, Cúcuta, tiene un partido complicado ante Equidad, que viene jugando bien y que en su última salida en casa goleó.