“Victus”, teatro para reflexionar en las tablas del Colón | El Nuevo Siglo
Foto cortesía
Viernes, 1 de Abril de 2022
Redacción Cultura

Una puesta en escena que explora los temas de la memoria y el perdón a través de las voces de las víctimas, bajo el título “Victus”, llega a las tablas del Teatro Colón. Una obra escrita y dirigida por Alejandra Borrero que estará en temporada desde este viernes hasta el domingo como parte del Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá.

“Este año, el Teatro Colón presentará por primera vez en su escenario ‘Victus’, una obra que fue estrenada en mayo de 2016 y en donde los protagonistas son personas reinsertadas de diferentes grupos armados del conflicto en Colombia. Es una obra con un gran valor, en la que el público podrá reflexionar sobre lo que significa la reconciliación después de tantas décadas de violencia”, explica Claudia Del Valle, directora del Teatro Colón. 

El resultado de este proyecto es una puesta en escena en la que 16 participantes confrontan sus experiencias de vida en medio del conflicto y después de él, las heridas que les dejó la guerra y el valor de la reconciliación. En la obra además tienen la oportunidad de interactuar con el público y hacerlo partícipe de su proceso de perdón. 



La pieza fue presentada inicialmente en Casa E en 2016 y desde entonces ha recorrido otros escenarios del país como el Teatro Villa Mayor en Bogotá, el Teatro Pablo Tobón Uribe de Medellín y el Teatro Municipal Enrique Buenaventura en Cali. Ahora llega al teatro más emblemático de Colombia. 

“‘Victus’ es la obra que ningún colombiano se puede perder. Es una muestra clara de que la reconciliación se puede, de que el amor cambia las cosas. Si hemos puesto algo ahí, es amor. Tienen que verlos, han aprendido a abrazar, a amar. Hay que verlos entrar en ‘Victus’ y darle un abrazo al público sin que el público los conozca”, asegura Alejandra Borrero.

Cada personaje reconoce las cualidades humanas del otro, sin juicios ni etiquetas. Lo sagrado de la vida se representa a través de un ritual: el fuego como luz en medio de la oscuridad, la tierra simboliza el principio y la causa del conflicto, el agua refleja la fluidez de los participantes y el viento es el aliento de vida para continuar.