El Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa arribó este miércoles a la ciudad boliviana de Santa Cruz (este), en la que expresó el cariño que tiene por Bolivia, donde pasó su infancia, y evitó referirse a las críticas que su visita despertó en el oficialismo.
"(Vargas Llosa) se mostró muy contento y recordó el gran cariño que siempre ha sentido por Bolivia, un país donde pasó los primeros diez años de su infancia", informó a la AFP Oscar Ortiz, presidente de la Fundación Nueva Democracia que patrocinó la visita del laureado escritor.
Vargas Llosa pasó su niñez en Cochabamba, en el centro de Bolivia, donde cursó los primeros años de primaria en el Colegio La Salle y aprendió a leer, un episodio que él mismo recordó al recibir el premio Nobel (2010), asegurando que era "la cosa más importante que le ha pasado en la vida".
La primera esposa del escritor fue justamente la boliviana Julia Urquidi.
La llegada de Vargas Llosa desató críticas del gobierno boliviano que condenó su pensamiento político y llegó a acusarlo de pretender "generar una oposición dura, radical, en contra del presidente Evo Morales".
El escritor y excandidato presidencial peruano (1990) tiene previsto durante su estadía reunirse con el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, opositor al presidente Morales y uno de sus adversarios políticos en las próximas elecciones presidenciales de octubre.
A su arribo al aeropuerto Viru-Viru de Santa Cruz, Vargas Llosa, acompañado por su esposa Patricia Llosa, se mostró gratamente sorprendido por la expectativa que ha generado su visita, comentó Ortiz.
El autor de La Ciudad y los perros, Conversación en La Catedral y El sueño del celta, participará de coloquios literarios y ofrecerá el jueves una conferencia de prensa, además de disertar sobre "los desafíos a la libertad en América Latina".
Ortiz explicó que, a partir del viernes, el Nobel de Literatura visitará durante cuatro días misiones jesuíticas de Chiquitos, Patrimonio Cultural de la Humanidad.