Libia Stella Gómez, luego de un largo recorrido por las pantallas de grandes centros de cultura del país, lleva su más reciente obra cinematográfica, Un tal Alonso Quijano, a las salas de cine colombianas desde este jueves.
Alonso Quijano, profesor de Literatura de la Universidad Nacional, conoce muy bien la obra de Miguel de Cervantes Saavedra, en especial Don Quijote de La Mancha. Un día, en medio de una clase, cruza la línea que existe entre ficción y realidad para convertirse en el valiente caballero del libro. Aunque parece víctima de la locura, todo indica que es una vía de escape a un dolor que lo atormenta desde hace décadas.
“Cuando era estudiante de cine y televisión tomé en literatura una electiva que se llamaba Cervantes y el Quijote. El profesor era muy particular, llegaba a clase con el personaje, diciendo textos del Quijote, entonces empecé a fantasear que un día el profesor iba a entrar no solo con el Quijote en la voz, sino que llegaba caracterizado por completo, que pasó solo en mis fantasías, pero fue la semilla de este proyecto. Luego empecé a preguntarme por qué el profesor tendría este episodio de locura, y cuando logré encontrar la respuesta, relacionando esta historia con los eventos de nuestra realidad colombiana, ahí pude entender de qué iba y cómo tenía que contar esta historia”, explicó la directora Libia Stella Gómez, en una entrevista para El Espectador.
La película, que tuvo su estreno digital a través de la plataforma YouTube el año pasado, en medio de la pandemia, estará ahora disponible en la gran pantalla en las salas de Procinal Bogotá, el Centro Colombo Americano de Medellín, el Museo de Arte Moderno de Medellín, el Teatro Libre Bogotá, la Cinemateca La Tertulia, salas All Cine Mariquita, entre otras.
Escrita y dirigida por Libia Stella Gómez, y distribuida por Alterna Vista, Un tal Alonso Quijano contó con Sebastián Caballero, Wilmer Moya y Exler Puerta en la producción; Diego Gama en la dirección de fotografía; Alirio Cruz en el diseño de producción; Julián Álvarez en la dirección de arte; Juan Sánchez en la edición; Julián Sánchez en el diseño sonoro; Rafael Martínez en el sonido directo; Camilo Villamizar en el rol de coordinador de postproducción; Guillermo Castañeda en la asistencia de dirección y la música de Desarme Rock Social y José Esmoris.