La estatal Comisión Nacional de Telecomunicaciones de Venezuela (Conatel) renovó por cinco años más la concesión de frecuencia al canal privado Televen, informó este domingo el medio, que aseguró que el permiso fue otorgado sin condiciones que vulneren su "independencia editorial".
"Les informamos que la concesión de TELEVEN ha sido renovada sin condición alguna, por 5 años más", escribió el canal en su cuenta en la red social Twitter.
"Corporación Televen informa que la renovación ha sido acordada sin ninguna condición que vulnere su derecho a la independencia editorial", agregó en otro mensaje.
El medio hizo el anuncio luego de que en las redes sociales se difundieran el domingo rumores sobre presuntas condiciones de Conatel, como dejar de transmitir programas críticos con el gobierno, para renovarle la concesión.
Algunas medios privados confrontaron con el gobierno de Hugo Chávez (1999-2013), fallecido el 5 de marzo, quien tras el breve golpe de estado en su contra en abril de 2002, acusó a la prensa privada de complicidad con los golpistas.
A raíz del golpe, el gobierno venezolano decidió no renovar la concesión del canal RCTV en 2007, al que acusó de transmitir dibujos animados en lugar de los disturbios durante la revuelta.
La televisora Globovisión, que antes de su venta en mayo fue el único medio que confrontaba abiertamente con el gobierno de Chávez y daba especial cobertura a la oposición, deberá renovar su concesión en 2015.
Los nuevos dueños de Globovisión, que según sectores de la oposición venezolana están ligados a altas figuras del chavismo, anunciaron un giro hacia el centro en su política editorial y en los últimos meses han cambiado su programación.
Además, la cadena dejó de transmitir en directo las intervenciones del líder opositor Henrique Capriles y ha entrevistado a altas figuras del chavismo, como el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, lo que no ocurría desde hacía una década.
Una decena de emblemáticos periodistas renunciaron a trabajar en el canal en las últimas semanas en rechazo a su nueva orientación editorial./AFP