El Rally Dakar-2014, que tuvo en enero un paso por Bolivia en las categorías de motos y cuatriciclos, dejó una secuela de contaminación ambiental que no ha sido aplacada, informó este viernes una autoridad indígena del suroeste del país.
"No ha habido mitigación, sigue permanente ahí la basura, las botellas de vidrio, las latas de cerveza, los plásticos de la comida que han utilizado (..), esa basura sigue permanente(mente)" en el lugar, reclamó Guillermo Flores, autoridad indígena del poblado de Tolopampa de Potosí, a la radio Fides.
Durante los dos días de competición se desplazaron al lugar unas 245.000 personas, 92% de ellas bolivianas, que generaron un movimiento económico de 62 millones de dólares en el país, según estimaciones del viceministerio de Turismo.
Sobre todo los plásticos, que son altamente contaminantes, "están en las rinconadas porque han sido arrastrados por el viento", sostuvo Flores.
La realización del Dakar, que podría repetirse en 2015, "para el gobierno es importante, pero el daño que nos deja a los pueblos no es buena imagen, aunque para el gobierno sea una buena política", razonó.
"Tenemos que planificar. (...) El gobierno también tiene que hacer análisis (para ver) si le conviene o no a las poblaciones", planteó.
El afamado rally recorrió los departamentos andinos de Oruro y Potosí, bordeando principalmente el Salar de Uyuni, la pastilla salina más grande del mundo y una de las maravillas naturales del país.
Bolivia fue incluida este año por primera vez en el trazado del Dakar, que además recorrió Argentina y Chile.