El público colombiano se trasladará por una semana a la antigua Rusia gracias a la Filarmónica Joven de Colombia que interpretará Petrushka de Ígor Stravinsky. Con una puesta en escena que mezcla música y arte, al mejor estilo de las ferias y carnavales, este semillero de talento estará en Bogotá, Pereira, Popayán y Cali.
El concierto se dividirá en dos partes: en la primera, la orquesta interpretará una de las obras del colombiano Luis Carlos Figueroa a modo de homenaje y contará con la participación de Santiago Cañón, violonchelista, y Guillermo Ospina, ambos solistas invitados. Luego se dará inicio a la composición de Stravinsky.
Helena Barreto habló con EL NUEVO SIGLO acerca de lo que significa este programa tanto para ellos como músicos, como para los colombianos, y nos adelantó algo de lo que preparan para el 2015.
EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué Stravinsky y por qué Petrushka?
HELENA BARRETO: Definitivamente el ballet Petrushka es difícil, complejo y exigente, porque cada nota y cada efecto de esta pieza, que tiene una duración considerable, tiene una intención específica y tiene una forma en la que debe ser interpretada, lo que implica toda una carga y un conocimiento profundo de la obra. Por estas razones, se convierte en un recurso de formación artística musical importante. Escogimos Stravinsky porque está muy presente en la formación artística que se diseñó para la Filarmónica Joven de Colombia, considerábamos que obras del compositor ruso debían ser parte de esta experiencia que queremos ofrecerles a los músicos y que constituyen un recurso de formación.
Además Stravinsky es un compositor muy recursivo, de una expresión y de una riqueza en las sonoridades y en los timbres que tienen la capacidad de ilustrar de una manera muy gráfica la obra. Hay cantidad de situaciones, sentimientos y tramas que transcurren en el relato de esta historia y se constituyen en un repertorio de altísimo impacto, por eso creemos que es ideal que el público colombiano la conozca.
ENS:¿Por qué deciden mezclar música con teatro?
HB:En realidad mientras los músicos están interpretando el ballet no hay una intervención teatral como tal, sino hay un efecto de luces y una serie de personajes que están presentes en el teatro y que contribuyen a generar en el público una relación con el arte.
ENS:¿Cómo llegaron al proyecto músicos internacionales?
HB:Nos reunimos en un trabajo que llamamos residencia artística que me gusta compararlo con un centro de alto rendimiento, en donde tenemos los mejores retos musicales y técnicos. Estamos trabajando con el maestro Carlos Izcaray y estamos acompañados de 16 profesores que son el diferencial de la Filarmónica Joven de Colombia y con esto lo que quiero decir es que ellos cumplen el papel de los directores técnicos con la orquesta. Así que durante diez días desarrollamos este campamento en donde se realizan clases individuales, clases magistrales, ensayos de fila, ensayos de sección y ensayos generales, así como análisis de repertorio y otras actividades que enriquecen este proceso para que todo lo que queremos proyectar en la gira salga perfecto. Contamos, por ejemplo, con músicos de Minnesota Orchestra, New York’s Metropolitan Opera, Orquesta Nacional de España y la Escuela Reina Sofía en Madrid, entre otros.
ENS: ¿Cuáles son las expectativas con Petrushka?
HB:La idea es llamar la atención del público colombiano, pues esperamos que los teatros estén absolutamente llenos y como toda institución artística esperamos fortalecer un puente de comunicación en torno a la belleza y el arte.
ENS:Después de Petrushka ¿qué viene para la filarmónica?
HB:Para nosotros como Orquesta viene la planeación de un año 2015 lleno de nuevas experiencias, la idea es realizar el estudio profundo de los músicos y compositores del siglo XX, así como el de los clásicos. El año próximo vamos a trabajar mucho sobre Mozart, además de una programación amplia para desarrollar gira entre enero y abril. La idea es salir de nuevo del país para compartir el talento que tenemos acá con el resto del mundo.