Las fiestas de fin de año vienen acompañadas de constantes celebraciones en donde mantener el peso ideal se convierte en todo un reto, ya que al momento de que los colombianos eligen un plato navideño prefieren la calidad que medir los componentes nutritivos que tengan estas preparaciones.
Por estos días es común el aumento de peso debido al cambio de hábitos que las personas adoptan, “gran parte de la población aumenta su peso por un exceso de calorías provenientes de lo tradicional como la natilla y los buñuelos, pero también de las bebidas alcohólicas y azucaradas, además, porque disminuyen la actividad física por los compromisos sociales”, advierte Adriana Ruíz, nutricionista y coordinadora del programa de salud y bienestar de Sodexo.
La encuesta, realizada a más de 360 personas por Sodexo a través de una encuesta digital, reflejó que entre los datos más altos en el consumo de platos en Navidad está que el 70% prefiere comer buñuelos con 230 calorías cada uno de tamaño mediano, el 64% natilla que puede contener 230 calorías en una porción de 60 gr y el 37% elige tamales con 500 calorías de acuerdo con la experta en nutrición.
Por otro lado, el estudio arrojó una cifra preocupante, pues el 63% de personas encuestadas no le preocupa su peso a la hora de elegir algún alimento navideño. Por tanto, es importante prender una alerta y evitar impactos negativos en su salud que se pueden dar por estas fechas.
La buena noticia es que sí se puede mantener el peso adecuado durante la época navideña sin tener que privarse de disfrutar los deliciosos platos típicos; “utilizando ingredientes bajos en sodio, grasa y azúcar para las preparaciones, acompañando los platos con abundantes ensaladas con poca cantidad de aderezos, utilizando frutas como postre, sirviendo porciones pequeñas, incluyendo bebidas sin calorías como el agua”, afirma Adriana Ruíz de la multinacional
Entre las recomendaciones dadas por la experta está: evitar repetir los alimentos, disminuir el consumo de carbohidratos en el día para poder consumirlos con moderación en las reuniones de la noche, comer despacio y masticar bien, disminuir el consumo de bebidas alcohólicas, realizar actividad física mínimo de 150 minutos a la semana, hidratarse todos los días con agua antes de las comidas y disminuir la sal en las preparaciones.