La Premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú exigió este miércoles la renuncia del canciller de Guatemala, Harold Caballeros, al tildarlo de racista por unas declaraciones donde minimiza los ocho muertos tras un desalojo militar en el oeste del país.
La líder indígena guatemalteca, a través de un comunicado de la fundación que lleva su nombre, afirma que las declaraciones del canciller demuestran "un profundo racismo que se traduce en desprecio a la vida de personas pertenecientes al Pueblo Maya, las víctimas en este caso".
"Asimismo recuerda que este desprecio a las personas por su condición étnica es un principio fundante del fascismo", agrega.
"A juicio de esta Fundación y su presidenta, el canciller no es digno de ese cargo (...) y exigen al ministro de Relaciones Exteriores que debe dejar el cargo", asevera el escrito.
"Después de estas malintencionadas y desafortunadas declaraciones el canciller no debe seguir representando al Estado guatemalteco en el exterior por su pensamiento antidemocrático y discriminador", insiste la Premio Nobel de la Paz 1992 junto a su fundación.
El pasado lunes, Caballeros se reunió con representantes diplomáticos para darles la versión oficial de lo ocurrido el jueves, cuando militares disolvieron violentamente una protesta en Totonicapán, 170 km al oeste de la capital, matando a ocho indígenas.
"Reconozco con dolor que en ciertas latitudes ocho muertos es una cosa muy grande, (pero), aunque suena muy mal decirlo (...) todos los días tenemos (por la violencia) el doble de muertos. Entonces como que tampoco es una llamada de atención tan grande", dijo el canciller en esa ocasión.
Tras ser fuertemente criticado por esas declaraciones, Caballeros tildó de "burros" a sus detractores en su cuenta de Twitter, y, horas después, los llamó "pendejos". Luego, el martes pidió disculpas por los exabruptos.