El Museo Interactivo Maloka llevará a su público a conocer la realidad que viven cientos de migrantes a través de Migrar, un acto de valor, una exposición en la que se podrán conocer diferentes actividades que reflejan las dificultades por las que pasa a diario esta población.
Desde este mes Maloka abrirá sus puertas a su público con esta muestra interactiva, que contó con el respaldo de la Alcaldía de Bogotá, la Fundación Ford, la Organización Internacional para las Migraciones, la Oficina de Población, Refugiados y Migración (PRM) del Departamento de Estado de Estados Unidos y el Gobierno de Japón.
Los visitantes de Migrar, un acto de valor recorrerán un laberinto que contiene varios retos, los cuales les permitirán experimentar los desafíos a los que se enfrentan los migrantes. La muestra se divide, entonces, en tres zonas:
Travesía: desde las historias de ocho personas que decidieron migrar, contadas a través de interacciones multimedia, en esta zona se responderá a las interrogantes ¿por qué migramos? y ¿cuáles son los obstáculos en el camino?
Memoria: acá los asistentes descubrirán porqué es necesaria la memoria para comprender la migración, para esto se demostrará que todos tienen una historia de migración y cómo este fenómeno hace parte de la condición humana.
Encuentro: los visitantes comprenderán cómo les enriquece la migración y se celebra la diversidad cultural. Finalmente, luego de vivir las experiencias de los migrantes, los asistentes reconocen que migrar, en verdad, es un gran acto de valor.
Para asistir y disfrutar de esta exposición y de los demás recorridos del Centro Interactivo, es necesario que los visitantes se inscriban previamente a través de la página web.
Panorama nacional
El viaje inicia empacando una maleta en la que no caben los recuerdos ni los seres queridos, para recorrer un camino incierto que se hace difícil por el frío, el hambre, el cansancio y otros obstáculos, que enfrentan a diario miles de migrantes, incluidos los nacionales venezolanos, quienes dejan atrás sus lugares de residencia en busca de un lugar mejor.
Y es que la migración es una realidad que ha estado presente desde los inicios de la humanidad, que ha estado siempre en constante movimiento, impulsada por la necesidad de mejores oportunidades. De acuerdo con datos de Naciones Unidas (UN DAES), en 2019, el número de migrantes alcanzó los 272 millones, lo que representa 3,5% de la población mundial.
Precisamente, con el fin de que los ciudadanos se pongan en los zapatos de aquellas personas que deciden migrar y conozcan de primera mano sus historias de travesía, se lanza esta exposición con la que, por medio de juegos, actividades interactivas, música y más, se invita a niños y sus familias a reflexionar sobre la migración, así como a cuestionar y prevenir comportamientos discriminatorios que se pueden generar en comunidades de acogida de esta población.
Para Adriana Correa, presidente ejecutiva de Maloka, “la migración es una oportunidad para hablarle a nuestro público de una ciencia viva, en producción permanente y preocupada por interpretar lo que pasa en nuestro contexto; una ciencia que aporta en la construcción de rutas de convivencia, que invita a reflexionar sobre la indiferencia o los prejuicios que tenemos frente a los migrantes”.
La directiva agrega que, para el desarrollo de esta muestra, se utilizaron varias metodologías de diseño participativos. “Se convocó a la población migrante, expertos, público general, niños y académicos, con quienes se realizó una serie de foros y talleres, para tener en la exposición todas las voces y miradas sobre la migración”.
Para la jefe de Misión de la OIM, Ana Durán Salvatierra “la exposición interactiva ‘Migrar, un acto de valor’ abre una oportunidad este diciembre, mes en el que conmemoramos el Día Internacional del Migrante, para reimaginarnos la movilidad humana desde la empatía y la solidaridad hacia las personas que toman la decisión de migrar, así como desde el reconocimiento de sus aportes al desarrollo de nuestras sociedades. Desde la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) apoyamos estos espacios creados para las familias, los niños y niñas, y a través de la ciencia, la creatividad y la pedagogía, contribuimos a promover la reflexión sobre la inclusión y la cohesión social, así como a prevenir formas de discriminación y xenofobia, objetivos enmarcados en el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular.”