La versión moderna de la ópera "Idomeneo, rey de Creta" de Mozart, dirigida por el italiano Michele Mariotti, con verdaderos migrantes y refugiados náufragos, emocionó al público del Teatro Opera de Roma por su conmovedora condena de la guerra
"Este espectáculo cuenta la historia de los migrantes, habla de guerra. Así lo entiendo y así lo siento. Es un mensaje que habla de mí y por eso acepté participar", explica a la AFP-TV el joven migrante sómalo Aldul Razak mientras se prepara en el camerino del teatro romano a vestir el traje de militar pero también de refugiado.
Razak, que llegó a Italia hace dos años a bordo de una de las tantas barcazas que atraviesan el Mediterráneo, participa en la ópera con unas 30 comparsas, verdaderos migrantes y refugiados que arriesgaron la vida para realizar el sueño de un futuro mejor.
La obra de Mozart, compuesta en 1712, que pone música a las luchas homéricas en la isla de Creta, en realidad habla de cómo salir del ciclo de destrucción y de conflictos para lograr la paz y el perdón, del futuro después de la guerra, por lo que resulta de una extraordinaria actualidad.
Las imágenes impactantes de un campo de refugiados con un muro de rejas bajo un cielo gris con abarrotados refugiados y migrantes frente al mar, marcan las primeras escenas de la ópera.
Una obra en la que el mar Mediterráneo, eje central del mito griego, con sus tragedias, es el verdadero protagonista.
"Es la metáfora de nuestros días", explicó a la prensa el canadiense Robert Carsen, a cargo de la puesta en escena, quien contó con la colaboración de la asociación católica Comunidad de San Egidio, encargada de los llamados corredores humanitarios a través de los cuales han llegado a Italia casi tres mil migrantes y refugiados de manera de evitarles el llamado viaje de la muerte atravesando el mar.
Un tema social para Roma
"Ayer como hoy el Mediterráneo divide pueblos pero también une. Carsen quería 150 personas entre actores y coro. Pensé que era bello involucrar a migrantes de verdad.
El teatro no debe hacer política social pero la verdad es que es un tema social importante para la ciudad", comentó por su parte Carlo Fuortes, superintendente del teatro Opera de Roma.
Carsen, entre los directores de escena más famosos e innovadores, emplea con eficacia el video, usa montañas de chalecos salvavidas anaranjados y transmite la emoción de aquellos que han tenido que enfrentarse al dolor, la devastación, la angustia.
Coproducida con los teatros de Madrid --donde fue presentada en marzo de este año-- Toronto y Copenhague, en Roma es la primera vez que participan migrantes de verdad.
"Para muchos la herida está aún abierta. Hay escenas que son como una liberación de los sentimientos. Por ejemplo la tempestad en el mar, algo que han vivido y puede que les sirva para metabolizar esos momentos, algo muy duro", explica la italiana Diana Morea, coordinadora del proyecto y colaboradora de la Comunidad de San Egidio.
Para la hermosa nigeriana Bella Godwin, que vive desde hace 4 años en Italia y que atravesó ese mar traicionero que se ha cobrado miles de vidas, se cumple otro sueño.
"Toda la vida he soñado con ser actriz, algo que no había logrado... Este para mí es un primer paso", confiesa mientras se mide un uniforme verde con boina y se prepara a ser peinada.
El actor y mimo italiano Simone D'Acuti reconoce que se trata de una puesta en escena muy moderna, en la que "hay soldados vestidos como los actuales soldados y desplazados vestidos como desplazados. Dos pueblos que terminan uniéndose", adelanta.