EN UN especial despliegue de sentido y de significado de las idiosincrasias de lo popular, el Ministerio de Cultura, junto con el Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia, la Alcaldía de Sonsón y la Fundación Tridha trasladan las cocinas tradicionales del maíz a Expoartesano, La Memoria 2015, bajo el nombre Colombia sabe: las cocinas del Maíz.
Con una programación de muestras de cocina en vivo, se realizará hasta el 26 de este mes un recorrido por el país a través del uso del maíz en las cocinas regionales de Santander, Nariño, Boyacá, Cauca, Tolima, Huila, Valle, Cundinamarca, Bolívar, Meta y Antioquía, departamento al que este año se le hace homenaje visibilizando la diversidad de sus cocinas tradicionales.
Como parte de la programación de Colombia sabe: las cocinas del Maíz se llevará a cabo una puesta en escena de las Fiestas del Maíz de Sonsón, homenaje a Antioquia y su cultura, y se cerrará con la muestra de los ganadores del Premio Nacional de Cocinas Tradicionales del año 2014.
El Ministerio de Cultura de Colombia, en el marco de la implementación de la Política para el Conocimiento, la Salvaguardia y el Fomento de la Alimentación y de las Cocinas Tradicionales de Colombia, pretende, entre otras actividades, la identificación, la valoración y la preservación de las cocinas tradicionales como sistemas de identidad, pertenencia y bienestar de la nación y el reconocimiento de las mismas como parte de nuestro patrimonio cultural inmaterial.
En Expoartesano, el Ministerio de Cultura ha encontrado un importante espacio, tanto para el reconocimiento de las cocineras y los cocineros tradicionales, como para la exaltación de la vida simbólica y material, la creatividad, y el sentir y el ser sentido, ya que este es un escenario idóneo en el que se combinan los saberes y sabores de nuestro país con las tradiciones e innovaciones artesanales.
Un gran mundo
El maíz reviste significaciones ligadas a los mundos de lo sagrado y lo profano, es considerado un elemento vital: es agricultura, ritual y cocina; recorre una particular cadena de usos y valores en los diferentes grupos del territorio nacional.
Colombia, por su estratégica ubicación geográfica, es, desde la época prehispánica, el espacio donde convergen las culturas mesoamericanas y andinas, y es considerado uno de los mayores centros de diversificación de los cultivos de origen americano. La biografía del maíz en Colombia está asociada, según hallazgos arqueológicos, a la etnia Katia en el período entre el sexto milenio a.C y el S. XVI d.C. Las evidencias dan cuenta de la práctica de la obtención y la transformación de maíz y yuca, y del aprovechamiento de fuentes salinas. Este hecho enmarca un punto de partida para las prácticas agrícolas y culinarias particulares de las sociedades indígenas, mestizas y afro-descendientes ancestrales y actuales.
Colombia es uno de los países de mayor diversidad en maíces nativos y criollos; de acuerdo a las regiones y a los tipos de agroecosistema, se poseen numerosas variedades y ecotipos.
En la actualidad se conocen 27 variedades de maíces criollos. La mayor parte de esta diversidad se ha podido mantener gracias al trabajo de organizaciones campesinas, quienes a través de bancos de semillas han logrado preservar y caracterizar el maíz como expresión de patrimonio cultural vivo.