“Lo que está roto”, en el ciclo de mujeres del Teatro Petra | El Nuevo Siglo
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Lunes, 25 de Abril de 2022
Redacción Cultura

El solo de pole art y danza creado e interpretado por la bailarina y pole dancer Sandra Suárez, titulado “Lo que está roto”, es la pieza que abre el primer Ciclo de mujeres en el Teatro Petra, que tendrá lugar desde este mes hasta el 30 de junio.

En el ciclo también participan obras como “El Bastardo Soler”, nueva creación de la directora Martha Márquez; “La triste vida” de Joaquín Florido, de María Adelaida Palacio y “Yo (no) estoy loca”, con la interpretación de Marcela Valencia. 

“En Petra siempre estamos pensando en temas que tienen que ver con la igualdad, la diversidad, la equidad y el género, tanto a nivel creativo como a nivel de circulación, por eso decidimos invitar a un grupo de mujeres, poderosas, creativas y talentosas para que se tomaran la Santa Sede con sus obras”, señaló el teatro.

Una exigente coreografía que transita entre lo poético y lo acrobático, realizada en una plataforma de pole de cinco metros, es el eje central de “Lo que está roto” (LQER). Tras una fractura que inmovilizó a Sandra Suárez por varios meses, surge esta pieza, que se basa en una reflexión e investigación sobre las grietas, las ruinas y la belleza, que la acerca al arte kintsugi, una técnica japonesa que propone resanar las fracturas de las cerámicas con resina y una mezcla de polvo de oro. “Me pareció una gran metáfora de vida. Sí, uno se rompe, pero no bota todo, uno tiene que restaurarse y hacer que sea mejor, único”, comenta Suárez sobre su hallazgo.



Es así como un hueso roto se convirtió, para la artista, en una oportunidad para trasformar el dolor, transitarlo y crear algo nuevo. “En esa misma época comenzó lo que, creo yo, es el estallido social más grande que hemos visto en este país, las manifestaciones sociales del 2019; entonces decidí crear una pieza que hablara de todo esto”.

Al final, “Lo que está roto” (LQER) es una experiencia de fuerza y belleza, que exige flexibilidad, equilibrio, coordinación, resistencia y un gran manejo técnico, pero que también reflexiona sobre las constantes situaciones de injusticia e inconformidad en las que vivimos. Esta obra es una metáfora para hablar de lo que significa vivir en este país, bajo un sistema en el que se está expuesto a ser roto constantemente, y cómo debemos reconstruirnos.