El juego de volúmenes que inyecta a la realidad una dosis de sensualidad y exuberancia en cada lienzo o escultura, define el estilo de uno de los artistas colombianos más destacados, Fernando Botero, quien con su genialidad hoy sigue sumando a la lista de las piezas más icónicas de la historia del arte con la presentación de sus dibujos más recientes en su exposición homónima en Bogotá.
“En la obra de Fernando Botero, desde sus inicios, el dibujo ha sido protagonista. Es así como para la elaboración de sus pinturas y esculturas, él parte de unos pequeños bocetos que realiza en sus cuadernos de apuntes, donde esboza la idea de lo que quiere plasmar en la obra, proceso que se va desarrollando en la medida que el artista se enfrenta al papel, a la tela o a la terracota”, le dijo a EL NUEVO SIGLO Luis Fernando Pradilla, curador de la exposición "Fernando Botero: dibujos sobre lienzo" y director de la Galería El Museo.
Así surge la reciente muestra artística, compuesta por siete grandes dibujos, en los que Botero utiliza técnicas como el grafito, lápices de colores y acuarela sobre lienzo. Una exposición, que así como en sus pinturas y esculturas más representativas, capta los detalles de la existencia, la condición humana y refleja la cotidianidad del hombre latinoamericano.
Botero, un ícono del mundo del arte
El maestro Botero a sus 87 años se ha posesionado como uno de los artistas más importantes e ícono en el mundo del arte, promulgando ante el mundo un estilo único en el que emplea distintos lenguajes.
Para Luis Fernando Pradilla “Fernando Botero ha sido determinante en la apertura del arte colombiano y latinoamericano en el mundo. Con Roberto Matta, Joaquín Torres García, Diego Rivera, Botero ha logrado un gran posicionamiento del arte latinoamericano en el contexto del arte universal. Creo que ese reconocimiento tan importante que ha merecido Botero, ha permitido que Colombia se posicione en el competido universo artístico de hoy”.
El Boterismo sigue…
Las obras del artista colombiano llegaron a las principales avenidas, plazas y escenarios del mundo durante su larga trayectoria, es así como muchos empezaron a denominar el arte del colombiano como Boterismo, un estilo que hoy sigue alimentando con dibujos inéditos sobre la familia, la naturaleza y las relaciones humanas capturando la idiosincrasia colombiana, a través del humor y la sutileza de los detalles, obras que se exhibirán no solo en Bogotá, sino también en otros cuatro países.
“Desde finales del 2018 y durante todo este 2019, Botero se ha dedicado a dibujar sobre tela, en gran formato y parte de estas obras son las que se van a presentar en la Galería El Museo de Bogotá, al igual que en Zurich, Suiza, Dubái y Londres, para realizar cuatro exposiciones simultáneas con estos dibujos recientes, piezas que no se han expuesto anteriormente”, indicó el curador.
En total son siete dibujos del maestro Botero, pero tres de ellas resaltan para mostrar una nueva mirada de su estilo, al público. Entre ellas está “La familia”, que según el curador Pradilla, es una obra en la que sigue reflejando las raíces de su infancia a través de un dibujo compuesto por el padre que está de pie, la madre sentada en una silla y su hijo pequeño, el cual ella carga sobre sus piernas. Todos se encuentran en el interior de su casa.
En el dibujo el padre está mirando al frente, la madre hacia un lado, el pequeño mira a su mamá y el perro juguetón busca la atención de la familia. Seguidamente, se destacan detalles como una cajonera, en la que se ve un florero, a su respaldo un espejo, también una puerta y un tapete en el piso.
En esta pieza Botero resalta el valor de la familia y las relaciones del ser humano con los animales, como en este caso con el perro y el caballo. “Para Botero, el tema de la familia es importante ya que su compleja composición, permite soluciones inesperadas. Existe una bella tradición de retratos familiares en la historia del arte. Cuando pinta hombres, mujeres, animales y objetos, para él es el aspecto fundamental de la composición lo que le interesa”, comentó.
Otra de las piezas imperdibles de esta muestra es la obra titulada Dos Borrachos, en la que Pradilla describe dos hombres abrazados con la mirada al frente. El hombre de la izquierda un poco despeinado, vestido de camisa y tirantes, y un su mano tiene un vaso con licor. En la cara de uno de ellos se le ve un poco afectado por los tragos que ha tomado. El hombre de la derecha está vestido de traje con la corbata suelta y la camisa desabotonada. Tiene un sombrero de ala corta en la cabeza, puesto hacia un lado y cigarrillo encendido que cuelga de sus labios. En su mano derecha, tiene una botella de licor. Alrededor de sus cuerpos, hay colillas de cigarrillos y una botella tirada en el piso.
El tercer dibujo más destacado en la exposición es el Bodegón con mujer, en la que se destaca una naturaleza muerta con su carácter, un tema muy importante en sus obras al referirse a la sensualidad de las formas de las frutas. “Esta pieza es una característica mesa cocinera recurrente en la obra de Botero, en la cual hay una canasta llena de naranjas verdes sobre un mantel recogido, al igual que cascos de estas frutas y un par de bananos. En el fondo se ve una cortina hacia un lado, donde se divisa un poco de un fondo azul”, describió Pradilla.
Sin duda, una exposición en la que se podrá explorar una nueva mirada del maestro Botero con “sus obras extraordinariamente construidas, muy placenteras para disfrutar y sorprenderse como público, que al estar en frente de una obra de Botero, la primera reacción es una gran sonrisa. Es una obra que sin mayores pretensiones genera un gran placer”, finalizó.