La cita de la moda que todos esperaban llegó al fin: el creador francés Nicolas Ghesquière, venerado por los fashionistas, presentó este miércoles su primera colección para Vuitton en un decorado depurado, lejos de la fastuosa extravagancia de su predecesor Marc Jacobs.
La nueva mujer de Vuitton imaginada por Ghesquière es femenina, moderna y se viste con ropa ceñida al cuerpo, muy estructurada y con cintura marcada.
"No quise hacer un tema en especial, ni contar una historia, ni ser teatral", explicó el diseñador a la prensa tras el desfile. "Mi visión de Vuitton tiene propuestas múltiples: es claramente el guardarropa de una mujer con talento para mezclar prendas, más que para construirse un look único".
Ghesquière realizó un importante trabajo con los materiales, especialmente el cuero, a menudo asociado a otras texturas como por ejemplo en un conjunto de camiseta de tirantes de cuero y minifalda.
Los tonos son invernales: negros, beiges, marrones. Vestidos y faldas terminan casi todos por encima de la rodilla.
El diseñador había dejado un mensaje a los privilegiados invitados que asistieron a este gran momento de la moda: "Hoy es un nuevo día, un gran día. Van a ver mi primer desfile de moda para Louis Vuitton", escribió el diseñador en inglés para manifestar su "inmensa alegría de estar aquí".
Entre los famosos que presenciaron el estreno: el diseñador Jean-Paul Gaultier -mentor de Ghesquière-, la princesa Charlene de Mónaco, la actriz Catherine Deneuve y su hija Chiara Mastroianni, y la también actriz Isabelle Huppert.
En su mensaje, simplemente firmado "Nicolas", el creador saludó "el trabajo de Marc Jacobs" y proclamó su voluntad de sumarse a la "filosofía" y al "orgulloso legado" de la casa Vuitton.
El fabricante de maletas y bolsos, que festejó este año 160 años de existencia, es relativamente un recién llegado en el mundo de la moda, ya que se sumó al prêt-à-porter a fines de los años 1990, y probablemente por eso su marketing insista en el abolengo. "¿No es acaso la meta de todo diseñador crear algo intemporal?", dice el mensaje de Ghesquière.
- El negocio son las carteras -
El desfile Vuitton cerró un mes de colecciones de moda para el otoño-invierno 2014/2015 presentadas en Nueva York, Londres, Milán y París.
Tuvo lugar en un espacio creado especialmente en el majestuoso patio cuadrado del Louvre, donde Marc Jacobs ya había presentado sus colecciones para Louis Vuitton.
En octubre pasado, el creador norteamericano había recibido una ovación de pie para su último desfile, tras dedicar 16 años a reconstruir la imagen del maletero, convertido en la marca de moda más rentable de la industria del lujo, que obtiene el 80% de sus ingresos en marroquinería, es decir en buena medida las carteras de mujer.
Nicolas Ghesquière, de 43 años, fue contratado en noviembre pasado como director artístico de la línea femenina de Louis Vuitton, marca conocida en el mundo entero por las iniciales de su logo "LV" y que representa cerca de la mitad de las ganancias del número uno del lujo en el mundo, el poderoso grupo LVMH.
"Me gusta la modernidad de Vuitton, el confort de sus prendas funcionales y bellas, la forma en que pueden combinarse, en esta nueva manera informal de vestirse, que es lo que a mí me interesa", dijo.
Formado por Jean Paul Gaultier, Ghesquière es considerado como uno de los creadores más talentosos de su generación. En 1997, a los 26 años, se convirtió en el heredero de uno de los grandes nombres de la moda, Cristobal Balenciaga.
Ghesquière permaneció 15 años al frente de la legendaria casa, reinventó su estilo y se forjó una reputación de niño prodigio, visionario de una moda vanguardista y elitista.
Su regreso a las pasarelas era tanto más esperado cuanto que no había reaparecido desde su salida de Balenciaga en 2012.