‘Entre fuego y agua’, conquistando festivales de cine del mundo | El Nuevo Siglo
La cinta cuenta la historia de Camilo, un joven afrodescendiente, adoptado por una familia indígena, que busca a su madre biológica para entender quién es realmente.
Foto cortesía
Jueves, 29 de Abril de 2021
Redacción Cultura

La película colombiana Entre fuego y agua, la historia de Camilo quien emprende un viaje en búsqueda de sus orígenes, llegará a las pantallas de Canadá, Alemania y Filadelfia a través de los más exigentes festivales cinematográficos del mundo.

Esta semana la cinta tendrá su premier norteamericana en el Festival Internacional Documental de Canadá - Hot Docs, que se realiza desde este jueves hasta el 9 de mayo. Así mismo, participará en el Festival Internacional de Cine Documental de Múnich, que empieza el 5 de mayo y en el Festival de Cine Latino de Filadelfia, que arranca a finales del mismo mes.

Entre fuego y agua sigue la travesía de Camilo, un joven afrodescendiente, hijo adoptivo de dos indígenas Quillasinga de la laguna de La Cocha, en Nariño, quien siempre se ha preguntado quiénes son sus padres biológicos.

Al ser el único hombre negro en su comunidad, Camilo siempre se ha sentido diferente. Fue víctima del racismo y el bullying que lo llevaron a abandonar la escuela. Ahora decide emprender un viaje físico y espiritual para descubrir sus orígenes.



Esta coproducción de Viso Producciones con Señal Colombia, en asociación con el Resguardo Indígena Quillasinga Refugio del Sol y Chicken & Egg Pictures, tiene como productora a Sonia Barrera Gutiérrez y como codirectores a Anton Wenzel y a Viviana Gómez Echeverry.

En el recorrido que ha tenido la cinta en diferentes países ha tenido gran éxito y ha recibido varios elogios. “Las personas se sienten muy identificadas con la historia de Camilo en su búsqueda de identidad e incluso preguntan cómo ha continuado su vida después del rodaje. Por otro lado, tanto los organizadores de los festivales como el público manifiestan que la película tiene una visión muy respetuosa del mundo indígena. En el festival Hot Docs una de las programadoras es una indígena de Canadá, quien aseguró que se nota una investigación seria y respetuosa sobre el tema de las ceremonias indígenas, tanto del Yagé como del tabaco”, afirmó Viviana Gómez.

Así como pantallas internacionales han proyectado esta historia colombiana, las autoridades de la comunidad indígena Quillasingas también tuvieron un acercamiento a la cinta, aunque con limitaciones debido a la pandemia. “Les gustó mucho, precisamente porque se sintieron tratados con respeto y, aunque no son de muchas palabras, les impresionó que no habíamos abusado de sus usos y costumbres, convirtiéndolos en una cosa turística. Resaltaron también que habíamos mostrado de una manera muy bonita la historia de Camilo y todo su proceso de sanación”.

Debido a la emergencia sanitaria el estreno del documental en Colombia está en veremos, así como lo asegura Gómez: “Estamos analizando con Señal Colombia nuestro coproductor, la mejor manera de entregar Entre fuego y agua al público colombiano, tanto en festivales, salas, plataformas y la pantalla de televisión, que hacen parte natural del recorrido de una película, pero ante la situación actual, aún no se ha definido”.

Los Quillasinga

Al sur de Colombia, en el departamento de Nariño, en la laguna de La Cocha, vive el pueblo indígena Quillasinga. A lo largo de la historia su gente fue desplazada por la violencia o asesinada en medio de la guerra interna del país. Los Quillasinga se dispersaron, perdieron su lengua y muchas de sus costumbres, incluso dejaron de existir políticamente como pueblo.

Hace veinte años la gente comenzó a retornar a su territorio y gracias a las historias de los mayores han comprendido que son indígenas y que tienen que buscar sus raíces. Se han organizado y han logrado que el estado colombiano los reconozca como Cabildo. A este proceso comunitario lo llaman El despertar del pueblo Quillasinga.

En medio de este renacer indígena también está presente la metáfora de ‘volver a los orígenes’ que procura Camilo a lo largo de todo el documental, más allá de si encuentra o no a sus padres.