Con un humor feroz, mucho ingenio y poesía, además de las actuaciones de tres actores y más de 20 muñecos de distintos tamaños, se presenta El Rinoceronte, de Ionesco, bajo la dirección de Isabelle Matter. Se trata de una coproducción del Teatro Nacional y la compañía suiza Des Hélices.
Esta obra representativa que cuenta la historia de un pueblo cuyos habitantes sufren de una epidemia de “rinocerontitis”, sólo un hombre sencillo y algo borracho se resiste a perder su personalidad. Una historia en tres actos y mucha gracia, para reflexionar sobre el totalitarismo y la uniformidad.
Un domingo común y corriente en una pequeña ciudad cualquiera, un rinoceronte atraviesa la plaza y aplasta a un gato. La ciudad es rápidamente invadida por la “rinocerontitis”, una enfermedad que contagia progresivamente a sus habitantes, volviéndolos conformistas y uniformando sus pensamientos hasta convertirlos en el animal.
En una escenografía de madera, llena de cajas, cartones, escaleras, tablas y archivos donde se conservan los últimos vestigios de la humanidad, los actores Fabiana Medina, Héctor Loboguerrero y Jorge Rico, le dan vida a la obra, ayudados de títeres cuyo tamaño va aumentando a medida que se va acercando a su intimidad. Como si aquellos muñecos fueran seres humanos, estos personajes adquieren personalidades definidas, bostezan, se enamoran, discuten, se asombran, sueñan y se emborrachan.
En el juego de personificaciones entre actores y títeres, el montaje se convierte en un fantástico universo de juegos donde la escenografía se construye y se destruye, los actores adquieren cierta plasticidad de mimos, y su dinámica va entre los juegos de equilibrio, los efectos de perspectivas y otros de fuerzas, y tensiones.
Escrita por Ionesco en 1959, El Rinoceronte mantiene un actual discurso político. La obra, además de criticar el conformismo, también pone al descubierto la sumisión de los ciudadanos al poder y la pérdida del individuo entre la masa, donde aquel que es diferente y no desea convertirse en uno más, un rinoceronte, tiene que ser desechado por el poder y la sociedad despersonalizada.
LA ACLAMADA obra de Eugéne Ionesco cuenta con la actuación de tres actores: Fabiana Medina, Héctor Loboguerrero y Jorge Rico, además de 30 marionetas./