Se apagan las luces y empieza el desfile con "una explosión de puro Perú", la definición de sí misma de Meche Correa.
Una falda negra de tul adornada con bordados dorados es su tarjeta de presentación, a la que siguen minifaldas de rayas de intensos colores, todo ello inspirado en la artesanía peruana.
"A mi estilo, trato de traer lo auténtico, lo propio, pero en un contexto muy contemporáneo", explica esta diseñadora autodidacta.
El público aplaude sus faldas con motivos florales acompañadas con grandes collares y diademas de flores. Se trata de faldas reservadas para las grandes fiestas regionales peruanas pero que Correa adapta a la mujer de hoy: "¿Por qué no usarlo nosotras ya en un contexto actual?", se pregunta.
Alejándose de la tradición, la joven Jessica Butrich, de 28 años, apuesta por una estética retro, inspirada en la época de 1940 a 1960, mezclada con "la onda súper gráfica, divertida, superjuvenil y naïve", y la utilización de materiales peruanos como el algodón pima.
Así, la más joven de las tres diseñadoras, que a sus 28 años desfila por primera vez fuera de Perú, presenta unos biquinis y trajes de baño que recuerdan a tiempos pasados, como los mini-shorts que los acompañan, o los monos y pantalones anchos, siempre con el talle alto.
Y en los accesorios, los protagonistas son los corazones, las fresas, las cerezas y las mariposas, que se repiten en bolsos, zapatos y pendientes.
La sutil influencia de la cultura peruana en la moda de Sitka Semsch se encargó de cerrar el desfile: "no es solamente, como siempre decimos entre los peruanos, la pollera y la llama, somos mucho más que eso. La posibilidad de mostrar que el Perú es moderno, hay evolución. Es como gritarle al mundo: 'mira lo que en Perú somos'", reivindica Semsch.
Formada en Estados Unidos, donde trabajó con el diseñador Michael Kors, Semsch presenta un estilo "clásico contemporáneo con ciertas matices de Perú", pero pensado "para una mujer del mundo".
La herencia peruana se ve en sus camisas y vestidos con bordados y en los tejidos empleados, como el algodón pima. Todo ello en colores naturales, tonos tierra -desde beige a naranjas y rosados- y verdosos.
Tres creadoras y embajadoras del diseño de su país para mostrar las tendencias de la moda peruana, el país invitado este año en la Madrid Fashion Week por razones que tiene muy claras su directora, Leonor Pérez Pita.
"Primero se ha elegido al país. Indudablemente, es un país con potencial en crecimiento con un entusiasmo por la moda y con una capacidad para el diseño impresionante", aseguró Pérez Pita.
"Somos un país que ha venido de tener unos años muy duros" y se ha convertido "en un país emergente, con un bagaje de cultura enorme ¿quién no te habla de Machu Picchu, Cuzco?", coincide, por su parte, Semsch./AFP