Bogotá una vez más le da pista a su Festival de Danza en la Ciudad, que en su edición número 13 llevará a otro nivel las artes escénicas con su agenda de actividades virtuales y presenciales.
Bajo el lema “Poéticas de la proximidad y el encuentro” el evento, que se llevará a cabo desde esta semana hasta el 30 de noviembre, presentará experiencias de circulación y visibilización de la danza en Bogotá, resaltando la labor de bailarines y coreógrafos de la ciudad, transmitiendo legados culturales, mediante una programación que incluye obras completas pregrabadas, videodanzas, talleres y presentaciones en lugares donde las personas transitan su cotidianidad, en espacios no convencionales.
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“Esta es una versión atípica que nos va permitir encontrarnos en lugares donde no nos habíamos visto antes con el público, ya que vamos a tener piezas para el ámbito virtual, pero también llevaremos la danza al encuentro presencial con todas las medidas y las distancias necesarias, en espacios abiertos de Bogotá para que los ciudadanos puedan disfrutar este mundo danzario”, afirma Ana Carolina Ávila, gerente de danza del Instituto Distrital de las Artes (Idartes).
La imagen oficial del evento estuvo a cargo de Jonathan Cárdenas, diseñador del Idartes. “Esta imagen tiene la maravillosa idea de sostener al otro para seguir; ese es el mensaje que tiene esta versión atípica del Festival Danza en la Ciudad; la poética de la proximidad implica encontrar eso que es esencial en el encuentro con el otro. Es una imagen que representa lo posible dentro de lo improbable, hoy es posible llevar la danza a las calles de la ciudad para que la gente disfrute sin necesidad de trasladarse”, explica Ávila.
La programación del Festival inició este viernes con la presentación virtual de la Gala danza mayor, una puesta en escena de las cuatro agrupaciones ganadoras de la Beca de circulación en danza mayor 2018 que, por primera vez, tuvo como invitados especiales a los maestros del proyecto Archivo vivo del Idartes.
En la franja virtual también estará incluida la obra “Mariposa de hierro”, de Juana del Mar Jiménez, que se transmitirá el 18 de este mes, a las 7:00 p.m. La pieza es un retrato de una mujer desde la privacidad de su hogar envuelta por la violencia en la que está su país que, a través de paisajes sonoros y atmósferas cinematográficas, acerca a los detalles de su intimidad, fragmentados por un estado onírico que redimensiona y transforma la pieza.
Luego, el último viernes de septiembre el turno es para la obra “Érase una vez”, de PUD Family, el primer musical urbano escrito y dirigido por Richi Sánchez. Una puesta en escena que cuenta la conocida historia de la “Cenicienta” llevada al mundo de la danza urbana, la obra se desarrolla a través de la actuación, el canto y la fusión de estilos de la danza urbana, y cuenta la historia de un grupo de jóvenes que luchan por mostrar su arte.
Los detalles de estas transmisiones virtuales se podrán conocer en la página www.danzaenlaciudad.gov.co y a través de las redes sociales Facebook e Instagram “@danzaenlaciudad”.
Además, la apuesta por regresar gradualmente a la presencialidad será todos los sábados de septiembre; una etapa que iniciará hoy a las 3:00 p.m. en Ciudad Bolívar, con la Corporación Artística Jera Danzas y su obra “Las andanzas de Juan Lucho”, se trata de un montaje que por medio del lenguaje teatral y de la danza folclórica, muestra la lucha incansable de un arriero por alcanzar el amor, en medio de fondas paisas y picardías antioqueñas, a ritmo de rumba decembrina, redova y vueltas sabaneras.
Adicionalmente, la agenda académica estará compuesta por una serie de talleres que se realizarán cada semana y que incluye sesiones como “Gózalo y baila a tu manera”, “Oso panda arcoíris” y “Danza árabe e Iluminación para la danza”.
“Este es un ajedrez completo que reúne la apuesta por bailar, la apuesta por ir a calle, pero especialmente, el compromiso con el cuidado de todos, de quienes bailan, de los equipos de producción y de los ciudadanos. Por eso, hacemos un seguimiento permanente a todas las condiciones actuales en cuanto a espacios públicos habilitados, la salud de artistas y equipos que movilizan el Festival; de esta manera, estaremos confirmando y anunciando la programación cada dos o tres semanas de aquí hasta el 30 de noviembre”, señala Ávila.
La arquitectura de la programación está enfocada en la invitación pública que recibió propuestas en cuatro líneas de acción diferentes, entre las que se destacan las apuestas pedagógicas que incluyen mediación con el público y algunas acciones para mitigar el impacto psicológico del confinamiento, que implican acciones de movimiento colectivo. Los proyectos seleccionados reciben un reconocimiento económico que varía entre $2 y $4 millones, para un total de $350 millones entregados.
En la franja virtual también estará incluida la obra “Mariposa de hierro”, de Juana del Mar Jiménez, que se transmitirá el 18 de este mes, a las 7:00 p.m.
Como invitados especiales, el Festival recibirá en su programación, entre septiembre y noviembre, a cuatro ganadores de becas de creación en danza de nivel nacional, otorgadas por el Ministerio de Cultura 2020; también a los triunfadores de la convocatoria “Bogotá Ciudad Folclor 2020”; a la Batalla Internacional de Break Dance que este año será una batalla Bogotá-Región; al III Encuentro Distrital de Escuelas de Ballet y encuentros con la comunidad de bailarines de salsa de la ciudad.
El Festival se extenderá por nuevos territorios, por tres meses, propiciando el encuentro entre bailarines y públicos a través de las ventanas, parques, calles, plazas, pantallas de computadores, dispositivos móviles para ir cada vez más cerca de la vida cotidiana de los bogotanos.