Una estrella del rock, la leyenda de la bohemia Latinoamérica y uno de los músicos más importantes de Argentina, así ha sido considerado durante sus años de gloria e incluso después de su muerte, Gustavo Cerati, quien fue la voz líder de la legendaria banda Soda Stereo y quien aún sigue en la memoria de muchos, más vigente que nunca.
Preocupado por hacer música de calidad y amante de su familia Cerati junto a otros dos grandes de la música desató lo que sería la “Soda-manía” con canciones que han pasado de generación en generación. Al cumplirse el sexto aniversario de su fallecimiento, EL NUEVO SIGLO hace un recorrido por su carrera y el movimiento musical que aún permanece.
Un roquero, un líder
El gusto por la música comenzó a sus nueve años cuando cantaba en fiestas privadas con un trio que formó con sus compañeros de escuela. Su destreza y versatilidad llegaron a demostrarle al mundo el líder innato que llevaba dentro al dirigir el coro de la Iglesia y del colegio, dejando composiciones desde su niñez, que luego harían parte de las canciones que grabaría con Soda Stereo.
La vena artística siempre había estado presente en la vida del argentino y su deseo de conformar agrupaciones lo era también, ya que en secundaria presentó junto a su banda una canción navideña en un concurso televisivo, el cual fue escogido como ganador. Pero allí no se detuvo con las bandas, tiempo después formó a Savage, Vozarron y Triciclo.
Bandas míticas como The Beatles o King Crimson fueron una fuerte influencia en la música de Gustavo y estrellas como Ritchie Blackmore, de la banda “Deep Purple”; David Bowie, de Pink Floyd, y Jimmy Page, de Led Zeppelin.
‘Soda-manía’
Soda Stereo se consolidó en un momento que marcó el final de la dictadura argentina. En 1982, el grupo estableció la formación del trío integrado por Zeta Bocio en el bajo, Charly Alberti en la batería y Gustavo Cerati en la guitarra y la voz principal.
Cuatro años después la banda iría por la conquista de Latinoamérica con una gira en la región presentándose en los países más importantes, a raíz de este tour comenzó lo que la prensa chilena llamó ‘Soda-manía’, pues sus fans cada vez crecían más, creando un movimiento.
Temas como Lo que sangra, “En la ciudad de la furia” y “Corazón delator” fueron las favoritas de sus seguidores en la época y las que los consagraban aún más como una de las bandas de rock más importantes de América Latina.
La carta del adiós
Por mal entendidos personales y musicales al interior del grupo, la banda se separó. El 1 de mayo de 1997 la agrupación hizo público un comunicado en el que se dio a conocer como “La carta del adiós”.
“Estas líneas surgen de lo que he percibido estos días en la calle, en los fans que se me acercan, en la gente que me rodea, y en mi propia experiencia personal. Comparto la tristeza que genera en muchos la noticia de nuestra separación. Yo mismo estoy sumergido en ese estado porque pocas cosas han sido tan importantes en mi vida como Soda Stereo. Cualquiera sabe que es imposible llevar una banda sin cierto nivel de conflicto. Es un frágil equilibrio en la pugna de ideas que muy pocos consiguen mantener por quince años, como nosotros orgullosamente hicimos. Pero, últimamente, diferentes desentendimientos personales y musicales comenzaron a comprometer ese equilibrio. Ahí mismo se generan excusas para no enfrentarnos, excusas finalmente para un futuro grupal en que ya no creíamos como lo hacíamos en el pasado. Cortar por lo sano es, valga la redundancia, hacer valer nuestra salud mental por sobre todo y también el respeto hacia todos nuestros fans que nos siguieron por tanto tiempo. Me gustaría aclarar que este estado no tiene nada que ver con mis frecuentes salidas a Chile ni con los esporádicos proyectos musicales que haya realizado al margen de Soda. Un fuerte abrazo”, se lee en la carta, publicada en portal web oficial del artista argentino.
Pero aún así, a pesar de la desintegración le dieron alegrías a sus fanáticos en 2007 con una gira a la que asistieron al menos 1 millón de personas, tal vez fue una de las más históricas. Cerati consolidó una larga trayectoria como solista, dejando al final de su paso por el escenario “Fuerza Natural”, su último trabajo discográfico que encabezó las listas de ventas en Argentina, México, Colombia y Chile.
Este último disco fue motivo para hacer también una gira bajo el mismo nombre del álbum, la cual el tanto el artista argentino como sus fanáticos no imaginarían que serían sus últimas presentaciones en vivo en el 2010, tiempo en el que se escucharon canciones como “Deja Vu”, “Magia”, “Amor sin rodeos” y “Desastre”.
Durante ese tiempo se conoció la noticia sobre el mal estado de salud del cantante, pues cayó en coma. Luego de cuatro años ese estado, un 4 de septiembre del 2014 la leyenda de la música en Latinoamérica, falleció.
En conmemoración a este aniversario la familia de Cerati publicó en Twitter esta semana un manuscrito inédito del tema “Tracción a Sangre”, el cual hace parte del último trabajo discográfico del argentino.