El papa Benedicto XVI envió el miércoles su primer tuit desde su cuenta personal, en el que manifestó su alegría por estar en contacto con los utilizadores de Twitter, a quienes dio su bendición.
"Queridos amigos, me uno a vosotros con alegría por medio de Twitter. Gracias por vuestra respuesta generosa. Os bendigo a todos de corazón", dice el primer tuit del Papa en su cuenta @pontifex, que superó poco antes de su envío el millón de seguidores.
En 40 minutos, su tuit fue retuiteado en su versión inglesa 15.600 veces. El tuit fue divulgado en otros siete idiomas: italiano, español, portugués, alemán, francés, árabe y polaco.
En un segundo tuit, enviado en respuesta a una pregunta sobre la mejor forma de vivir el "Año de la Fe", Benedicto XVI da tres recomendaciones en el estilo telegráfico de Twitter: "Dialoga con Jesús en la oración, escucha a Jesús que te habla en el Evangelio, encuentra a Jesús presente en quien está en la necesidad".
El Papa prevé responder este miércoles a otras dos preguntas entre las miles que se le plantearon desde la apertura de su cuenta hace una semana.
Tras haber dado su bendición a 4.500 fieles de todo el mundo reunidos en la sala Pablo VI para la audiencia general semanal, el Papa, de 85 años, envío su primer mensaje desde una tableta electrónica entregada por responsables del Consejo pontificio de comunicaciones sociales, por jóvenes y por la responsable de Twitter para la innovación social, Claire Diaz-Ortiz.
La tableta estaba colocada en una mesa cubierta con un tela roja. Tras enseñársele el funcionamiento de la tableta, Benedicto XVI, sonriente pero vacilante frente a una técnica que no domina, se puso las gafas y apretó con el dedo la tecla que le permitió enviar el primer tuit de la historia papal.
Por principio, el Papa no "sigue" a nadie en Twitter.
Desde que la cuenta papal es conocida, miles de personas le han enviado preguntas --serias, pero a menudo también irónicas, críticas u ofensivas-- que han sido dirigidas a un hashtag especialmente dedicado a este efecto.
En su editorial semanal en Radio Vaticano, el portavoz de la Santa Sede, el padre Federico Lombardi, destacó la importancia del hecho basándose en una metáfora del Evangelio: "un tuit puede ser acogido con entusiasmo o con rechazo. La semilla puede caer en tierra pedregosa o en la zarza de los prejuicios y quedar así silenciada. También puede caer en tierra fértil y libre, y generar un fruto y multiplicarse".
"140 caracteres, es poco" pero "la mayoría de los versículos del Evangelio son más cortos. Un poco de concisión no hace daños", destacó el padre Lombardi.
Actualmente ocho cardenales, decenas de obispos y centenares de sacerdotes y religiosas están presentes en Twitter. En este ámbito, la iglesia Católica tiene un cierto retraso, especialmente respecto a los grupos evangelistas.
Estos tuits "son un nuevo servicio para el Evangelio", resumió el padre Lombardi. Esta presencia en las redes sociales siempre fue alentada por Benedicto XVI, en un deseo de transparencia tras el ocultamiento en el pasado de escándalos como el de los sacerdotes pedófilos.