El jurista es investigado por el Congreso por presuntamente participar en hechos de corrupción.

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Desde hoy la Corte Suprema de Justicia retoma en forma sus actividades tras la vacancia judicial durante las festividades de fin de año. Uno de los primeros asuntos que entrará a resolver es la suspensión del cargo del magistrado Gustavo Malo, quien es investigado por la Comisión de Acusación de la Cámara por su supuesta participación en una red de corrupción que habría operado en la justicia. En su primera sala plena de este año, el jueves de la próxima semana, se votará si al jurista se le aplica esta medida, producto de una reciente reforma al reglamento interno de esta Corporación.  

Malo es investigado por la Comisión de Acusación de la Cámara por supuestamente hacer parte de una asociación que se habría dado entre 2013 y 2015 entre magistrados, ex magistrados y abogados para vender fallos en la Corte Suprema a favor de parlamentarios y otros políticos, a cambio de fuertes sumas de dinero.

Por este escándalo la Cámara también abrió investigación al exmagistrado Leonidas Bustos; en tanto que la Corte Suprema hizo lo propio con los senadores Hernán Andrade, Álvaro Ashton, Musa Besaile y los representantes Argenis Velásquez y Nilton Córdoba.

En septiembre pasado cuando estalló este escándalo revelado por el fiscal General, Néstor Martínez, la mayoría de magistrados de la Corte Suprema le pidió al jurista Malo que se separara temporalmente del cargo mientras que aclaraba su situación jurídica, incluso algunos le sugirieron renunciar para evitar un desgaste en la imagen del alto Tribunal.

No obstante, Malo aseguró que es inocente y por ello se negó a separarse del cargo. Finalmente optó por solicitar una licencia de tres meses, sin remuneración, la cual se cumplió en diciembre pasado.

En ese interregno la Corte Suprema se movió para buscar resolver,  por lo menos temporalmente, la enojosa situación del magistrado Malo, a quien incluso lo han relevado de seguir con varios procesos que estaban en su despacho.

En ese sentido el pasado 21 de noviembre, la Corte Suprema de Justicia aprobó una modificación a su reglamento que permitirá separar del cargo a magistrados investigados por delitos por la Comisión de Acusación de la Cámara. La norma calza al togado Gustavo Malo.

Con la norma aprobada por la Corte Suprema la separación del cargo se dará en casos en los que la investigación contra un magistrado imposibilite la correcta administración de justicia y ponga en tela de juicio el buen nombre, la imagen y la legitimidad institucional de la corporación.

Según la norma aprobada por el alto Tribunal, esa separación se podría presentar "cuando un magistrado de la Corporación esté siendo investigado penalmente por autoridad competente y a causa de ello se encuentre cuestionada de manera grave y fundada su honorabilidad, con el fin de garantizar la imparcialidad, la moralidad y la ética en la función de administrar justicia y para salvaguardar la legitimidad, la credibilidad, el buen nombre y el prestigio de la Corporación". Para la Corte, esta sería una "medida administrativa, preventiva y no sancionatoria".

La Corte esperaba una vez que Malo regresara de su licencia decidir si lo releva o no de las actividades jurisdiccionales y administrativas a su cargo, por el término que dure la investigación. No obstante el pasado 30 de noviembre, un día antes de que Malo volviera de su licencia, presentó una incapacidad médica.

El procedimiento

La decisión sobre una eventual suspensión del magistrado Malo del cargo debe ser tomada por mayoría de las dos terceras partes de los integrantes de la Corte, mediante votación nominal, previo un trámite breve y sumario.

La sala especializada de la que forme parte el magistrado investigado o un número no menor de cinco magistrados de la Corporación, primero debe hacer la solicitud a la Sala Plena e informar las razones en las que se fundamenta su petición para que se haga la separación del cargo.

Una vez se tome la decisión de relevo temporal de sus funciones, la sala especializada a la que pertenezca el magistrado investigado podrá suspender el reparto de expedientes a su despacho y reasignarlos a otros togados. También podrá proponer a la Sala Plena que sus funciones se encarguen a un funcionario de la misma Corte Suprema por el tiempo que sea necesario.

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