Polémica despertó la inclusión de la exsenadora Piedad Córdoba en la quinta delegación de víctimas que viajará hoy a La Habana para presentar su testimonio a la mesa de negociaciones entre el Gobierno y las Farc.

La controversia opacó que esta pretendía ser una delegación especial en la que se buscaba que también estuviera integrada por el alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria, quien tuiteó que desistió del viaje, por motivos personales, familiares e institucionales.

Los que hasta ayer se esperaban que sí viajaran en la delegación son, entre otros, el empresario caleño Mauricio Amintage, el líder sindical de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Domingo Tovar, y María Correa, hermana del sociólogo Alfredo Correa, detenido y asesinado por grupos paramilitares en Barranquilla, así como Isabella Vernaza, directora de la Corporación Valle en Paz.

Sin embargo, Natalia Castro, hija de la exsenadora Córdoba, indicó que “yo sería muy feliz si llegara a ser cierto. Sin embargo, eso que están diciendo es extra oficial”.

El senador Iván Cepeda, del Polo Democrático, explicó que dado que es la última delegación de víctimas, se pretendió darle una mayor importancia.

Para Cepeda, Córdoba es “una persona central en todo el proceso de paz durante todos estos años, que ha participado en múltiples circunstancias diferentes funciones esenciales para establecer el buen desarrollo de los diálogos”.

“Yo espero que esta delegación, como las otras, haga un aporte sustancial para llegar a la paz, con un modelo de satisfacción de los derechos de las víctimas. Los que integran ese grupo lo harán de manera apropiada”, explicó Cepeda.

Por su parte, la representante por Bogotá, Ángela Robledo, de la Alianza Verde, señaló que Córdoba “es una defensora de la paz y a mí me alegra que vaya en esa condición”.

En cambio, para la también representante por Bogotá, María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, primero habría que preguntarle si va en condición de secuestrada o retenida por los paramilitares.

Con todo, expresó, “a mí lo que me molesta de todo esto es que termine siendo una excusa para las Farc decir que cumplieron con las víctimas, creo que hay un desequilibrio en la responsabilidad judicial de las Farc, porque tienen que pagar”.

El senador uribista Fernando Nicolás Araújo sostuvo que "no entiendo por qué hay que escuchar a personas que no han sido afectadas por la violencia de la guerrilla, sino que por el contrario parecieran defender las tesis de las Farc. Esto lo que confirma es que son unos diálogos de paz tramposos y engañosos que lo único que hacen es generar el rechazo de los colombianos".

Araujo expresó que si el Gobierno Santos y las Farc buscan congraciarse con el pueblo colombiano, "están muy distantes de hacerlo, lo único que logrará la complacencia de Colombia con el proceso es que la guerrilla baje las armas, dejen de secuestrar colombianos, y asesinar soldados y policías".