Una nueva polémica se generó frente a la reapertura de la plaza de La Santamaría en Bogotá por la intención que manifestó la administración distrital de consultar a los bogotanos sobre el destino que se debe dar a este escenario, si sería para la realización de corridas de toros o para actividades culturales.

El anuncio cayó como un baldado de agua fría en el sector de la ciudadanía que gusta de la fiesta brava que esperaba que el escenario fuera reabierto tras un fallo de tutela que produjo la Corte Constitucional en septiembre pasado, cuando ordenó “restituir de manera inmediata la plaza de La Santamaría como plaza de toros permanente para la realización de espectáculos taurinos y la preservación de la cultura taurina, sin prejuicio de otras destinaciones culturales y recreativas que alteren su destinación principal”.

Sin embargo, la secretaria General de la Alcaldía, Martha Lucía Zamora, dijo que aún queda la opción de realizar una consulta popular para que las corridas de toros no retornen a este escenario. No obstante explicó que solo se podría hacer hasta el año entrante “porque la propuesta de consulta popular requiere del concepto favorable del Concejo de Bogotá, y la actividad que resta este año con el Concejo está relacionada con presupuesto. El tiempo que queda es muy corto”, dijo.

Las corridas de toros fueron suspendidas en Bogotá desde que llegó Gustavo Petro a la alcaldía en enero de 2012 porque su administración se opone al maltrato animal. De esa época a hoy el escenario ha sido utilizado para actividades culturales. Incluso en una oportunidad le instalaron una pista de hielo para que los bogotanos patinaran. Sin embargo, desde hace más de un año el escenario permanece cerrado por las fallas estructurales que la administración dice presenta.

En este sentido, la administración distrital anunció que el próximo 1° de diciembre abrirá la licitación para el reforzamiento estructural de La Santamaría.

Por su parte, Felipe Negret, presidente de la Corporación Taurina de Bogotá, reaccionó frente al anuncio de la administración capitalina de impulsar una consulta popular sobre el particular.

“Lamento que ahora la doctora Zamora pasa del estado de la confusión con que salió de la Fiscalía al estado de desquiciamiento desde la alcaldía a promover, no solamente la desobediencia de la sentencia de la Corte Constitucional sino lo que más llama la atención es que ella aspira a la Corte Constitucional, cuando desde un despacho público llama a desatender las sentencias de la Corte”.

Negret dijo que de esta manera la administración distrital busca aplastar a las minorías que gustan de las corridas de toros, además que planteó “que sería muy buena la consulta en la medida que también le preguntaran a los bogotanos si queremos que Gustavo Petro y toda su cuadrilla siga en la alcaldía”.