En Colombia cerca del 60% de construcciones no cumplen en su totalidad con la Norma NSR10 de 2010 de sismo resistencia, por ello Juan Carlos Salazar, gerente general de Protección Pasiva contra Fuego, PPF, hizo un llamado a constructoras y profesionales del gremio para atender de manera urgente este tema, pues hoy en día los constructores se focalizan en cumplir con los elementos activos dejando de lado la protección estructural que se conoce como pasiva.
Asimismo, Salazar explicó que “la protección activa puede fallar por un tema mecánico, eléctrico o humano, mientras que la protección pasiva no falla. Porque esta última está diseñada para que siempre esté ahí y cumpla su función en el momento que se requiera, además, la activa requiere mayor actividad humana, en mantenimiento, programación etc, mientras que la pasiva después que se instala no tiene ninguna incidencia humana”.
La protección pasiva impide que los pequeños fuegos se transformen en grandes y que sean origen de consecuencias dramáticas.
Los tres métodos de protección: existentes son pinturas, morteros o placas cumplen la misma función que es aislar el acero de la fuente de fuego. Normalmente, cuando un diseñador estructural o arquitectónico diseña una construcción en acero es porque quiere que se vea y porque pueden obtener figuras geométricas interesantes que son muy difíciles de lograr en concreto.
La protección activa es el conjunto de medios, equipos y sistemas instalados para alertar sobre un incendio e impedir que éste se propague, evitando las pérdidas y daños humanos y de bienes producidos por el fuego
Detección: el fuego se detecta mediante la colocación de detectores de humo, llamas y calor. Estos detectores permiten, trámite la señal de alerta, una evacuación de emergencia.
Supresión del fuego: esta categoría incluye todas las actividades cuyo objetivo es apagar el fuego por una acción directa.
Ventilación mecánica: esta categoría hace referencia al conjunto de las actividades cuyo objetivo es mantener libres de humo tanto las rutas de evacuación como las otras zonas específicas. Estas actividades se llevan a cabo mediante el uso de ventiladores mecánicos resistentes al fuego.