La compañía Smartmatic, empresa que suministró la tecnología en las elecciones, anunció que “hubo una manipulación” de “al menos un millón de votos”. Ante el asedio de la dictadura, 5 opositores se refugian en embajada de Chile. El viernes Maduro instala la Constituyente

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EL PRESIDENTE venezolano, Nicolás Maduro, quedó envuelto en un gran escándalo, luego de que la empresa que suministró la tecnología para la elección de su Constituyente asegurara que el resultado fue "manipulado".

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció la noche de ayer que la instalación de la Asamblea Constituyente, prevista inicialmente para el jueves, tendrá lugar el próximo viernes.

"Se ha propuesto que la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente se haga, en vez de hacerla mañana jueves, se organice en paz, con tranquilidad y todo el protocolo necesario, el próximo viernes a las once de la mañana", dijo Maduro, en un acto con asambleístas elegidos el domingo pasado.

Maduro explicó que aún está pendiente la proclamación, por parte del poder electoral, de 35 constituyentes de un total de 545 que integrarán la asamblea encargada de reformar la Carta Magna de 1999.

La postergación pretende "despejar las amenazas porque queremos que todo se dé en paz", insistió.

"Este proceso no lo mancha nada porque es transparente", aseveró el gobernante, quien atribuyó la versión de la compañía informática a una "reacción del enemigo internacional".

El Consejo Nacional Electoral (CNE), acusado de oficialista, aseguró que en la votación participaron más de ocho millones de personas, pero la oposición sostiene que apenas unos 3,5  millones, por lo que denuncia "el mayor fraude en la historia" del país.

La compañía SmartMatic afirmó que "sin lugar a dudas" "hubo manipulación" de los resultados. "Estimamos que la diferencia entre la cantidad anunciada y la que arroja el sistema es de al menos un millón de electores", dijo en Londres Antonio Múgica, presidente de Smartmatic, que dio soporte a los comicios venezolanos entre 2004 y 2015, incluida el que ganó Maduro en 2013 por estrecho margen sobre el opositor Henrique Capriles.

El poder electoral de Venezuela consideró este miércoles "irresponsable" y "sin fundamento" la denuncia de que manipuló el resultado de la elección de la Constituyente, hecha por la empresa que suministró la tecnología para la votación.

"Es una aseveración irresponsable con base en estimaciones sin fundamentos en la data que maneja exclusivamente" el Consejo Nacional Electoral (CNE), aseguró su presidenta Tibisay Lucena, al reaccionar ante la prensa a la acusación hecha este miércoles por la firma Smartmatic

Bajo temores y sanciones

El escándalo estalló en medio del rechazo de la oposición y de la comunidad internacional a la Constituyente, un suprapoder que regirá al país por tiempo indefinido y reformará la Carta Magna de 1999, impulsada por el presidente Hugo Chávez, fallecido en 2013.

Elegida el pasado domingo entre protestas que dejaron diez muertos, la Constituyente, rechazada por 72% de los venezolanos según Datanálisis, sesionará en el Salón Elíptico del Palacio Legislativo, en cuyo hemiciclo debate el Parlamento.

Los expertos advierten sobre más enfrentamientos, ya que desde que los opositores tomaron el control del Congreso en enero de 2016, simpatizantes del gobierno han irrumpido violentamente dos veces.

"Llegaremos con los retratos del Libertador Simón Bolívar y el comandante Chávez al Palacio Legislativo, de donde nunca más saldrán", dijo la excanciller y ahora asambleísta Delcy Rodríguez en un mitin en Caracas.

La esposa de Maduro, Cilia Flores, también asambleísta, anunció que una marcha acompañará la toma de posesión. "Llegaremos con el pueblo y diremos: aquí está el pueblo de Chávez que no se rinde". Esto lo dijo horas antes que el mandatario postergará para el viernes la instalación de la Constituyente.

La instalación se hará bajo fuertes tensiones con Estados Unidos y otros países que consideran la Constituyente una amenaza a la democracia, y la condena internacional por el encarcelamiento el martes de los opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma, quienes guardaban arresto domiciliario.

La Constituyente, según Maduro, reforzará además el poder comunal para profundizar el socialismo, acabará con la dependencia del petróleo -fuente del 96% de los ingresos del país-, elevará a rango constitucional los planes sociales, el control de precios contra la inflación y la entrega de alimentos subsidiados, en grave escasez.

Pero la oposición sostiene que Maduro, con rechazo del 80% según Datanálisis, buscará evadir elecciones. La próxima semana vence el plazo de inscripción de candidatos a los comicios regionales de diciembre, pero ahora todo depende de las decisiones de la Constituyente.

Refugio opositor

Una magistrada venezolana nombrada por la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, pidió protección y fue ingresada como "huésped" en la embajada de Chile en Caracas, llevando a cinco los acogidos por el gobierno de Michelle Bachelet, informó la Cancillería.

"Esta mañana, la ciudadana venezolana Zuleima Del Valle González, designada por la Asamblea Nacional de Venezuela como magistrado, ingresó a la residencia del Embajador de Chile en Caracas en busca de protección, siéndole otorgada la calidad de huésped", señala el comunicado difundido en Santiago.

"Logística copada pero compromiso incólume", lanzó el canciller chileno Heraldo Muñoz a travéz de su cuenta de Twitter, en alusión al nuevo ingreso que fija en cinco la cantidad de opositores que eligieron la representación diplomática chilena para buscar protección.

Muñoz destacó que esperan "respuestas del Gob (de Nicolás Maduro) e igual solidaridad de otras embajadas amigas".

"Todo conflicto tiene, en algún momento, negociación política", acotó.

El martes, los magistrados Beatriz Ruiz y José Fernando Núñez, parte de los 33 jueces de la Corte Suprema que fueron elegidos por el Parlamento venezolano, de mayoría opositora, hicieron su ingreso a la representación chilena.

Mientras que el sábado la jueza Elenis Del Valle tocó la puerta de Chile en Caracas pidiendo "protección política". 

En ningún caso se ha cursado pedido de asilo.

Chile ya concedió en abril protección en su embajada de Caracas al dirigente opositor Roberto Enríquez, presidente del partido socialcristiano Copei, acusado por el líder chavista Diosdado Cabello de estar involucrado en un "plan golpista" contra el gobierno de Maduro

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