Se reviviría en Senado las condiciones especiales de reclusión a los sindicados y condenados producto de un acuerdo de paz así como a quienes están hoy tras las rejas cumpliendo una pena alternativa en el marco de la Ley de Justicia y Paz. Así lo propone la ponencia para tercer debate de la reforma al Código Penitenciario y Carcelario, el cual será discutido por la Comisión Primera del Senado.
En ese sentido y de ser aprobada, la medida cobijaría a los integrantes de las Farc que eventualmente resulten privados de la libertad y condenados en desarrollo del Marco Legal para la Paz, el cual contempla la aplicación de penas alternativas en un escenario de justicia transicional, así como a los integrantes del Eln, organización que se ha mostrado interesada en iniciar con la administración Santos Calderón una negociación de paz.
La reforma al Código Penitenciario y carcelario es una iniciativa del Gobierno que fue radicada desde marzo pasado por la entonces ministra de Justicia, Ruth Stella Correa. El proyecto ya superó sus dos primeros debates en la Comisión Primera de Cámara y la plenaria de esa Corporación, y ahora le corresponde ser estudiada por el Senado, comenzando hoy por la Comisión Primera.
Si bien el proyecto actualiza la normatividad en materia carcelaria en el país, su objetivo principal es responder a la crisis que se presenta por la sobrepoblación en todos los centros de reclusión, por ello contempla incentivar medidas sustitutivas como la prisión domiciliaria para penas de cinco años o menos.
En cuanto al tratamiento de los internos el proyecto propone un enfoque diferencial reconociendo quehay poblaciones con características particulares en razón de su edad, género, orientación sexual y situación de discapacidad.
En ese sentido el articulado original del proyecto reconocía que “el Gobierno Nacional establecerá especiales condiciones de reclusión para los sindicados y condenados que hayan sido postulados por este para ser beneficiarios de la pena alternativa establecida por la Ley 975 de 2005 o que se hayan desmovilizado como consecuencia de un proceso de paz con el Gobierno Nacional”.
Sin embargo, la Comisión Primera de Cámara en primer debate hizo algunas modificaciones al articulado al señalar que no será el Gobierno sino el Inpec el que establecerá especiales condiciones de reclusión para los sindicados y condenados que hayan sido postulados por el Gobierno para ser beneficiarios de la pena alternativa establecida por la Ley 975 o que se hayan desmovilizado como consecuencia de un proceso de paz con el Gobierno Nacional.
Además agregó al articulado que “de igual manera se procederá respecto del personal de la Fuerza Pública”.
Luego la Comisión Primera de la Cámara mantuvo en el articulado un enfoque diferencial para la población carcelaria, pero eliminó del mismo a los sindicados y condenados beneficiarios de la pena alternativa establecida por la Ley 975 o que se hayan desmovilizado como consecuencia de un proceso de paz con el Gobierno Nacional, igual que el personal de la Fuerza Pública.
Avances
La reforma al Fuero Penal Militar (Acto Legislativo 16 de 2012) ya había establecido que los miembros de la Fuerza Pública cumplirán la detención preventiva en centros de reclusión establecidos para ellos y a falta de estos, en las instalaciones de la unidad a que pertenezcan.
En cuanto a la Ley de Justicia y Paz hay 71 desmovilizados de los grupos paramilitares y guerrilleros que cumplirán su condena alternativa de ocho años en 2014, por lo que recuperarían su libertad si es que han cumplido con el deber de reparar a sus víctimas.
En tanto que el tratamiento de la situación jurídica de los integrantes de las Farc está expresado en el Marco Legal para la Paz, el cual contempla que serán investigados y juzgados los responsables de delitos de lesa humanidad cometidos de forma sistemática.
Sin embargo, aspectos como la selección de casos para su investigación e incluso la posibilidad de cesar la acción penal en algunas situaciones serán desarrollados en una ley estatutaria por el Congreso en la eventualidad de que se logre firmar un acuerdo con esta guerrilla en las conversaciones que se desarrollan en La Habana, desde noviembre último.