El sacerdote Óscar Ortiz fue condenado a 19 años de prisión por liderar bandas criminales, informó este viernes a la AFP una fuente judicial del Tribunal Superior de Medellín.
Ortiz fue encontrado culpable de "concierto para delinquir agravado" por sus vínculos con bandas criminales, supuestamente integradas por paramilitares de derecha y narcotraficantes que actuaban en Medellín, donde era párroco desde 2000.
Una orden de captura fue emitida el jueves contra el sacerdote, una vez divulgada la sentencia de la Sala Penal del Tribunal Superior de Medellín. Hasta ahora no se ha informado de la detención de este sacerdote.
El tribunal revocó así una sentencia absolutoria previa a favor de Ortiz, que había sido emitida en 2012 por un juzgado penal local.
Según la prensa local, Ortiz ya había sido detenido en 2010 tras ser señalado por la Fiscalía como cabecilla de un grupo de paramilitares, al que se le atribuyen casos de sicariato, desplazamiento forzado, extorsión, entre otros.
Los grupos paramilitares de derecha, que en su lucha contra las guerrillas de izquierda cometieron crímenes atroces contra civiles, se desmovilizaron entre 2003 y 2006 en un proceso que les concedió beneficios procesales a cambio de información veraz sobre sus actos y reparación a sus víctimas.