A conciliación proyecto de Ley de Vivienda Segura | El Nuevo Siglo
Miércoles, 1 de Junio de 2016

Como un gran avance para el sector constructor en Colombia calificó la ministra de Vivienda, Ciudad y Territorio, Elsa Noguera, la aprobación del proyecto de Vivienda Segura hoy en la plenaria del Senado, lo que permite que el texto final pase a conciliación y sanción presidencial.

 

“Estamos muy contentos con esta aprobación en el Congreso del proyecto de ley de vivienda segura porque los colombianos tendrán certeza de que las nuevas edificaciones que se construyan en el país contarán con la reglamentación más rigurosa posible”, dijo la ministra Noguera.

 

La alta funcionaria explicó que este avance que tendrán las construcciones en el país fue producto del liderazgo del vicepresidente Germán Vargas Lleras, quien desde que estuvo en la cartera de Vivienda sabía que no bastaba solo con aumentar el número de casas para los colombianos, sino de hacer de estas unidades las más seguras.

 

“Lo que buscamos como gobierno es seguir fortaleciendo todos los mecanismos de control a la elaboración y revisión de diseños,  a la expedición de licencias y a la supervisión de cada una de las obras habitacionales que permitan garantizarles a los compradores de vivienda que su nuevo patrimonio en realidad es la mejor inversión que pueden hacer en sus vidas”, expresó Noguera.

 

El documento que ahora pasa a sanción presidencial fue enriquecido en cada uno de los debates tanto en Cámara de Representantes como en Senado y el texto final cumple con el objetivo de hacer de las construcciones de viviendas en Colombia, obras seguras y que se traduzcan en un beneficio real para los nuevos propietarios.

 

La iniciativa contempla tres nuevas claves de la construcción en Colombia:

 

1.- Protección a los compradores de vivienda: Será obligación de constructores de vivienda amparar los perjuicios patrimoniales causados a los propietarios afectados por el colapso o amenaza de ruina, como consecuencia de deficiencias en el proceso constructivo.

 

2.- Más medidas de seguridad: Todas las viviendas con más de 2.000 metros de construcción deberán contar con revisores y supervisores independientes del constructor. Se eliminan todas las excepciones que autorizaban a los constructores a realizar la supervisión de sus propias obras. Los supervisores técnicos deberán estar inscritos en el Registro Único Nacional de Profesionales Acreditados para garantizar que los profesionales sean especialistas en estructuras y cuenten con la experiencia e idoneidad necesarias. Una vez concluidas las obras, y previo a la ocupación de las nuevas edificaciones, el supervisor técnico deberá expedir, bajo la gravedad de juramento, el Certificado Técnico de Ocupación, el cual manifieste que la edificación se construyó de conformidad con la licencia de construcción y cumpliendo las normas de sismo resistencia.

 

3.- Mayor vigilancia para los curadores urbanos: Se creará la Superintendencia Delegada para el control de curadores urbanos, adscrita a la Superintendencia de Notariado y Registro, para efectos de la inspección, vigilancia y control del proceso de selección de los curadores urbanos. La nueva Superintendencia Delegada adelantará el concurso nacional de méritos para elaborar la lista de elegibles de curadores urbanos. De la lista que defina la Superintendencia los alcaldes podrán designar el curador urbano para su municipio o distrito.