No descansaremos hasta lograr el objetivo de estimular el crecimiento y crear empleo, aseguró el nuevo presidente del gobierno español
Por un ex banquero de Lehman Brothers como ministro de Economía, en el seno de un gobierno reducido de políticos experimentados, optó el nuevo presidente del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, para cumplir la dura tarea de sacar al país de la crisis.
Con una mano sobre la Constitución y la otra sobre la Biblia, el líder conservador, de 56 años, juró su cargo ante el rey Juan Carlos I en una solemne ceremonia tras la cual anunció la muy esperada composición de su ejecutivo.
La identidad del ministro de Economía era esperada con especial interés, sobre todo por los inversores, en un país que en las últimas semanas se encontró en primera línea de la crisis de la deuda en la Eurozona.
La cartera recae sobre Luis de Guindos, de 51 años, ex presidente del banco Lehman Brothers para España y Portugal.
Su objetivo principal será tranquilizar a unos mercados escépticos por la salud financiera de España, en plena crisis de la deuda europea y castigada con un desempleo récord entre los países industrializados, de 21,52%.
Para ello deberá combinar medidas de rigor y reformas, en un momento en que el país corre el riesgo de volver a caer en recesión a principios de 2012.
Para intentar contener el déficit, Rajoy ya anunció nuevos recortes en el sector público en 2012, por valor al menos de 16.500 millones de euros.
Y advirtió que esta cifra podría verse incrementada en 10.000 millones de euros más si el déficit público para 2011, fijado por el ejecutivo saliente en 6% del PIB, resulta ser finalmente de 7%.
Otro político de gran experiencia, el eurodiputado José Manuel García-Margallo, de 67 años, se hará cargo de una cartera de Asuntos Exteriores, que según anunció Rajoy tendrá la misión de dar a España un mayor papel en la esfera internacional y de estrechar los lazos con América Latina.
El ministerio de Interior, ante el que se presenta el desafío de gestionar el fin de la organización armada independentista vasca ETA, estará encabezado por Jorge Fernández Díaz, de 61 años, varias veces secretario de Estado en el gobierno conservador de José María Aznar (1996-2004).
Sólo cuatro mujeres figuran en el ejecutivo de Rajoy, formado por 13 ministros -frente a los 17 anteriores-, una de las cuales será su brazo derecho, Soraya Saénz de Santamaría, de 40 años, que fue nombrada vicepresidenta y portavoz de un gobierno del que será la cara más joven.
Las grandes prioridades de este gobierno serán "estimular el crecimiento y la creación de empleo", afirmó Rajoy, asegurando que su ejecutivo "no descansará hasta alcanzar este objetivo fundamental".
El nuevo ejecutivo entrará en funciones el jueves y el viernes celebrará su primer consejo de ministros, aunque será el siguiente, el del 30 de diciembre, el que tome las primeras "medidas urgentes en materia presupuestaria".
Antes de acabar el año, el consejo de ministros aprobará la prolongación del actual presupuesto y en enero presentará al Parlamento una ley de estabilidad presupuestaria para fijar los límites, a partir de 2020, de la deuda pública (60% del PIB) y el déficit estructural (0,40% del PIB).
Pese a que los mercados reaccionaron positivamente a la llegada de Rajoy al poder, concediendo a España una baja tasa de interés para su última emisión de deuda del año (1,735% a tres meses y 2,435% a seis), la inquietud persiste.
Así lo demuestra la amenaza de la agencia de calificación Fitch de degradar próximamente las notas de 14 gobiernos regionales y locales españoles, después de haber hecho lo mismo el 16 de diciembre con seis países de la Eurozona, entre ellos España, actualmente clasificada en "AA-" (cuarta mejor nota en una escala de 20).
Rajoy reemplaza en las riendas de España al socialista José Luis Rodríguez Zapatero, de 51, que gobernó el país de 2004 a 2011 y cuyo partido sufrió un grave revés electoral, penalizado por la impopularidad de unas medidas de rigor que no lograron sacar a España de la crisis./AFP