Denuncias de habitantes y comerciantes, pusieron en alerta al grupo investigativo de la SIJÍN MEBOG, quienes desde hace tres meses iniciaron en coordinación con la Fiscalía General de la Nación las primeras actividades investigativas en ‘ollas’ y ‘plazas de vicio’ que funcionaban cerca a parques y alrededores de instituciones educativas. Gracias a esta información suministrada, la Policía Metropolitana de Bogotá concentró esfuerzos y con agentes encubiertos logró atacar de manera frontal este flagelo que atenta contra la seguridad y convivencia ciudadana.
Los primeros resultados daban cuenta como cuatro peligrosas bandas desarticuladas y conocidas con los nombres de: “Los Sanber”, “Los Greñudos”, “Macondo” y “Sócrates”, tenían en común comercializar en sus territorios de influencia contiguos a zonas escolares, pequeñas cantidades de ‘estupefacientes’, los cuales eran ocultos en lugares poco comunes como rejillas, barrotes, pastizales de parques, entre otros y servían para evadir cualquier tipo de control policial.
Frente a esta situación, efectivos de inteligencia y policía judicial tuvieron buscaron la mejor forma de infiltrar un agente encubierto el cual no generará ningún tipo de sospecha y recolectará las futuras pruebas materiales (videos, audios etc…), para poder ser presentados ante la fiscalía. Fue así como uno de estos agentes logra desarticular, desde el interior de un establecimiento educativo, una de estas bandas que contrataba estudiantes para comercializar estupefacientes en la parte interna y externa del colegio.
Los resultados de esta operación permitieron la incautación de más de 100 mil dosis representados en diferentes “alucinógenos” y sus derivados, se encontraron tres armas de fuego con silenciador y más de un millón y medio de dinero en efectivo hallado en una de estas “ollas” producto del ilícito.