ATALAYA

¡Vive la resistance!

MIENTRAS  algunos ciudadanos, cuatro gatos diría Benedetti,  protestaban al frente del hotel Intercontinental de Medellín donde se desarrollaba el Foro Económico para América Latina, los colombianos recibieron la última declaración de huanpa Stalin Kerensky con  sorpresa e indignación: “Farc están preparadas para el terrorismo urbano si fracasan los diálogos de paz.”

Las reacciones no se hicieron esperar. El primero, fue el señor Procurador Dr. Alejandro Ordóñez, ¿Ordóñez Presidente?, quien por medio de un comunicado expresó su preocupación:

“La declaración del señor Presidente de la República revela una estrategia de terror para imponer por miedo los acuerdos de La Habana y para someter a la sociedad”.

Después, vinieron dos trinos de Juan Lozano:

Al amenazar con terrorismo urbano, el Presidente parecía más un vocero de las Farc que un digno representante del sufrido pueblo colombiano.

Estábamos acostumbrados a que las Farc nos amenazaran, a lo que no estábamos acostumbrados es que el Presidente lo haga. Inaceptable.

Álvaro Uribe, con valor cívico inigualable, hace un llamado a la resistencia civil en contra de los acuerdos de La Habana con las Farc  y, porqué, no con el ELN.

Tal vez, el ejemplo de resistencia civil más relevante durante la primera mitad del siglo XX fue el que representó Gandhi en la India invocando la desobediencia frente a la represión ejercida por el Imperio británico a la libertad de prensa en un comienzo y, posteriormente, por una serie de medidas en contra de la población lo que produjo el alimento para el discurso pacifista de Gandhi quien con una túnica blanca y su palabra logró convencer a todas las tribus no solo de la India, sino de Pakistán. 

Se podría comentar, también, sobre la resistencia civil de Solidarnosc, aquel sindicato polaco en cabeza de Lech Walesa, quienes cansados de la represión del comunismo en Polonia por el dictador Yaruselski, siempre con gafas negras al estilo Cristina K, decidieron parar los astilleros de Gansdk. En ese entonces, se contaba con un líder de la talla de Juan Pablo II, artífice de la caída del Muro de Berlín.

Otro ejemplo de resistencia civil puede ser el de los franceses durante la Segunda Guerra Mundial en protesta contra el gobierno colaboracionista de Vichy. Tras la firma del armisticio en 1940, la resistance francesa consistió en una serie de acciones al interior con el fin de diezmar a las fuerzas alemanas de ocupación. Es cuando aparece en la escena el general De Gaulle quien pronunció su famosa frase desde Londres: ¡Vive! la resistance, ¡Vive France Libre!.

El más reciente ejemplo de resistencia civil se encuentra en Venezuela donde un pueblo oprimido y subyugado por el régimen chavista hace lo imposible por salir de la tumba donde se encuentra. No hay alimentos, medicinas, gasolina, luz, nada. No hay nada en Venezuela y el pueblo resiste y resiste ante el silencio cómplice del gobierno de Santos y su canciller salomónica Holguín, de la unidad nacional, de Germán Vargas y del partido conservador, en minúscula.

¿El partido conservador colombiano? Sumido en una profunda crisis interna de doctrina. Sus senadores y representantes están más interesados en la mermelada oficial que en ofrecer una verdadera alternativa de poder guardando silencio cómplice frente a lo que sucede en Venezuela y la profunda crisis de gobernabilidad.

Los colombianos debemos reaccionar. Huanpa dispuesto al todo o nada con las Farc. Colombia está advertida. ¡Vive la resistance!

Puntilla: Huanpa; de la resistencia a la confrontación civil solo hay un paso. Usted y su gobierno serán responsables ante la historia por ello.