“Un hombre sereno, inteligente y demócrata”

La primera visita del presidente Iván Duque a Nueva York, con motivo de las sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, ha sido todo un éxito, no solo por ser su primera intervención en un ámbito multilateral, sino también porque con un discurso franco, sin dejar narcotizar su agenda, mostró una perspectiva amplia y clara de lo que es nuestro país.

Superó así el difícil reto de dejar de lado un tema bien difícil, puesto que los cultivos de coca en el país han subido en más del 500% en los últimos ocho años, como bien todos lo sabemos. Asunto que tiene al mundo, y en especial a los Estados Unidos, muy molesto con el anterior gobierno.

El presidente Duque le contó a la Asamblea todos los avances que hemos tenido en materia de terminación del conflicto armado y también habló de las mejoras que se requieren para que la consolidación de nuestra paz como política de Estado sea sólida y permanente, por los caminos de la verdad, la justicia, la construcción de equidad social, la reparación a las víctimas y el compromiso de no repetición.

También le dijo al mundo que aunque Colombia necesita de la ayuda económica internacional, lo que más requiere es que se le dé apertura a los espacios comerciales para poder así colocar sus productos en los mercados internacionales y que los inversores vengan a nuestro país con nuevos capitales que permitan mayor desarrollo y generen más puestos de trabajo. Dejó muy en claro que si bien es cierto que estamos recibiendo un alto número de migrantes venezolanos, también es cierto que requerimos del concurso y de la ayuda de la comunidad internacional, pues se trata no solo de un problema de nuestro país, sino una dificultad para las democracias del mundo y, por supuesto, para un pueblo que está pasando no solo hambre sino también grandes necesidades.

Aquellos que pronosticaban vientos de guerra con Venezuela vieron en Duque a un hombre sereno, inteligente y demócrata, que dijo con mucha claridad que para solucionar el gran problema de la migración de nuestros hermanos venezolanos se requiere -como ya lo mencioné- de una presión política internacional que lleve a un gobierno democrático y con un gran respaldo popular en el vecino país. Como quien dice: necesitamos una solución para el pueblo venezolano pero no nos prestaremos a acciones militares. Eso es de la mayor importancia para los colombianos. Claro está que recibió el respaldo del gobierno y del pueblo norteamericanos si dado el caso de llegarse a presentar una agresión contra Colombia, tengamos su respaldo.

En Naciones Unidas ya quedó establecido que Colombia cuenta con un Presidente de talante, joven, dinámico, comprometido, que habla con sinceridad, sin amargura. Quedó establecido que con el esfuerzo de los colombianos y el liderazgo de su Presidente construiremos un futuro en el que reine el respeto por la vida, la justicia y la legalidad.