La crisis de Instagram está latente. Tiene problema de identidad. Tiene un problema de usuarios nuevos. Y sobre tiene problema con sus usuarios: cada vez están generando menos contenidos. De a poco, la gran red social de las imágenes y los filtros se está desvaneciendo.
No deja de sorprender la dura caída que está enfrentando Instagram. ¿Saben qué está pasando? Los usuarios NO están posteando. Cuando hablamos de usuarios hablamos de los naturales, del que usa Instagram no para vender o no es influencer. Ojo a este dato: el 60% de las publicaciones que ven el feed (pantalla de inicio) son publicidades o contenido sugerido. Sólo el 40% de las publicaciones son de cuentas que seguimos.
La perspicaz escritora Jimena Valdez escribió lo siguiente para el medio Cenital, “el problema ahora es que Instagram está en crisis. Yo lo tengo en mi teléfono y hace semanas que lo siento raro. Básicamente, es pura propaganda y solo de vez en cuando te aparece algún posteo de alguna amiga”.
Valdez le pega de lleno a la nuez del asunto. La apuesta de Meta por convertir a Instagram en un gigantesco supermercado virtual está fallando duramente. Todos quieren vender y los usuarios se están aburriendo. Vale preguntarse ¿hace cuánto que no se hace algún desafío o tendencia que nazca en Instagram?
Ahora, la novedad es encontrarse con algún posteo de una amiga. Entones, lo que está pasando es que Instagram está dejando de ser una red social de confianza para convertirse en un Amazon con filtros. Meta quiso apostar por todo y terminó quitándole la identidad a una aplicación que parecía no tener límites de crecimiento. Para que vean los emprendedores que hasta los más poderosos se equivocan.
Otro punto tiene que explica la crisis que atraviesa Instagram tiene que ver con la privacidad. Lo que los gigantes de internet no quieren aceptar es que detrás de lo que ellos llaman usuarios hay seres humanos. Y los humanos se cansan. Los humanos se cansan de que los bombardeen con publicidad cada cinco segundos. Los humanos se cansan de sentirse vigilados.
Y para completar la foto está TikTok. La red social china está liderando por estos días en dos datos que son fundamentales: número de usuarios nuevos que descargan la aplicación y cantidad de publicaciones nuevas que están generando los usuarios. Parecía un imposible hace apenas un año que TikTok pudiera superar a Instagram, pero las proyecciones apuntan a que llegará a este logro para finales de 2023.
Ahora, y esto es fundamental saberlo, TikTok es una aplicación supremamente invasiva. Hace poco, expertos en seguridad digital hicieron un análisis sobre las políticas de privacidad de TikTok y la conclusión fue oscura: básicamente, una vez el usuario acepta los términos y condiciones esta app de videos cortos se apodera de toda la información que contiene el dispositivo.
Quizá TikTok está en la cresta de la ola y próximamente siga los pasos de Instagram y vaya cayendo. No se puede descartar, También es una posibilidad que Instagram se reencuentre con sus fieles seguidores volviendo a sus bases. Lo cierto es que este negocio de la tecnología es una divertida montaña rusa.