PARA lo que pasa en el mundo es cuestión que vale la pena detenerse para así poder analizar con serenidad lo que sucede en nuestro país. Aquí tenemos a un presidente que fue elegido conforme a lo establecido en la Constitución y no existe la más leve duda respecto a su credencial como primer mandatario, aunque haya una buena parte de la ciudadanía que no está de acuerdo con su comportamiento y que además le tache su reconocida obsecuencia con el gurú político, que como de alguna manera hay llamar al fenómeno político que encarna  Álvaro Uribe,  hace pensar que lo nuestro a lo mejor no es nada tan complicado como quieren hacer ver algunos inconformes.

Sí, Iván Duque se ha alejado de lo que estábamos a elegir, como han sido los presidentes absolutamente autónomos, dueños de sí mismos, pues si existe una cierta extrañeza.  Ha pasado un año y aunque todos queremos que le vaya muy bien, que lo haga ídem y que el país se sienta debidamente orientado en los pasos que ha dado, esto no ha sido posible. Por lo menos la ciudadanía no se ha percatado de que así ha sido.  Se esperaba que la instalación de las sesiones del congreso el pasado 20 de julio, podría haber sido una magnífica oportunidad para señalar puntos claros de sus propósitos de gobierno. Así no fue; su intervención no se puede decir que fue desafortunada pero sí no agregó cuestión alguna diferente a lo que podría haberse esperado.  Es una persona seria y serena a quien no parece que le queden grandes los problemas nacionales.

En el panorama internacional hay que admitir que en diversas partes se están viviendo momentos difíciles o hechos que condicionan el accionar de la gente. En la Madre Patria el primer ministro Sánchez ha perdido la mayoría en el congreso; lo pone en aprietos, su salida de la jefatura del gobierno parece que puede suceder. Este suele ser un episodio más o menos conocido que se podrá suceder pero que dado el régimen, salvo que haya un cambio radical en la composición del congreso las cosas no tienen un cambio radical que ponga a temblar la estabilidad de la nación.

Sin salirnos de Europa la atención de los analistas está puesta en la Gran Bretaña, allá la aprobación de su salida de la Unión Europea precipitó la salida de la Primera Ministra May lo cual codujo a la elección como Jefe del Partido de gobierno al señor Boris Johnson quien es ya el substituto de May.  El gran asunto al cual tendrá que en enfrentarse Johnson es el de la aceptación por la Unión Europea de las características que han sido planteadas para su salida, la cual según ha dicho Johnson será al final de octubre. Los traumatismos que se han presentado para formalizar la salida no fueron previstos. Como guarda semejanza con Trump ha dicho que sea como sea, al final de octubre se saldrá de la Unión Europea.