En su sentencia de 2012 la Corte Internacional de Justicia (CIJ) definió los limites norte, sur y oeste del archipiélago de San Andrés y determinó que esas islas generaban áreas marinas y submarinas (aguas interiores, mar territorial, zona contigua, zona económica exclusiva y plataforma continental) dentro del polígono y hacia el este. En su sentencia de 2023 puso límite a las pretensiones de Nicaragua a una plataforma extendida más allá de las 200 millas y ratificó el derecho de Colombia y sus islas a su propia plataforma. Por fuera del polígono quedaron Quitasueño y Serrana y más al norte Serranilla y Bajo Nuevo en condominio entre Colombia y Jamaica.
En su momento, el gobierno de Santos anunció que no acataría por anticonstitucional la decisión de 2012, pero las sentencias de la CIJ son inapelables y definitivas y tienen el respaldo de Naciones Unidas, de manera que se imponen por sí solas. En cambio, surgió la demanda de Nicaragua por una plataforma extendida de 150 millas más, lo que la CIJ descartó en la sentencia de 2023. Estas sentencias reconocen el derecho de los pescadores a navegar desde San Andrés o Providencia hacia los islotes y bancos del archipiélago.
Ahora el Canciller anuncia nuevas negociaciones con Nicaragua. La pregunta es ¿negociar qué? Si se pretende negociar límites, Nicaragua no va a aceptar ceder un metro. Si lo que se busca es que los pescadores puedan pescar en áreas que antes tenían y ahora son nicas ¿qué va a pedir Nicaragua a cambio? Seguro no va a dejar que los isleños compitan con sus propios pescadores en las áreas que les quedaron y las zonas colombianas ricas en pesca quedan muy lejos de Nicaragua (Serrana a más de 200 millas marinas). Eso presenta más problemas que soluciones. ¿Negociar derechos de navegación? En el mar territorial hay derecho de paso inocente y más allá de las 12 millas, libertad de navegación y eso se aplica a ambas partes. En la zona contigua se aplican derechos policivos, sanitarios, aduaneros y de drogas y persecución por los Estados costaneros. ¿Negociar que se respeten las sentencias? Eso no hay que negociarlo, es obligatorio por derecho internacional. ¿Proteger la reserva de la biosfera Seaflower? Esta reserva queda casi totalmente en las áreas colombianas y en ellas hacen muy buen trabajo Coralina y la Fundación Seaflower.
En cambio, es urgente que se tomen varias medidas respecto de San Andrés: la primera y más urgente es delimitar el archipiélago. Es verdad que ya está delimitado por la CIJ al norte, al sur y al oeste. Pero trazar una línea de base recta entre los cayos del Este-sudeste y Roncador, tendría la ventaja de que las aguas encerradas en ese polígono serían aguas interiores, donde hay soberanía plena del Estado y no existen ni siquiera la libertad de navegación ni sobrevuelo. Eso sí le daría dominio a Colombia sobre sus aguas (sobre la ZEE y la plataforma ya lo tiene) y ampliaría notablemente las áreas de inspección y vigilancia.
La segunda, es muy importante integrar el archipiélago al país. Ha estado abandonado mucho tiempo. Rojas Pinilla creó el puerto libre para ayudar, pero la presencia del gobierno es nula. Está invadido de narcos y ladrones. Aunque es una isla pequeña y uno creería que es difícil cometer crímenes impunes, hay homicidios. Está superpoblado y no exactamente por los raizales. Hay que controlar la inmigración. Yo resumiría diciendo que un área limítrofe tan vital para el país y con posibilidades de turismo tan importantes, hay que favorecerla más que a las regiones que ponen los votos.