La cumbre por la democracia | El Nuevo Siglo
Lunes, 13 de Diciembre de 2021

El presidente Joe Biden realizó el 9 y 10 de diciembre la cumbre por la defensa de la democracia para promover la reflexión y buscar mayor compromiso por parte de los 110 estados convocados por Estados Unidos a la reunión virtual. Advirtiendo que si bien los valores e instituciones democráticas unen a la comunidad internacional, en los últimos años la democracia está siendo amenazada por el auge de los autoritarismos. Lo cual, ha deteriorado sus condiciones en prácticamente todas las regiones del mundo.

El Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral -IDEA-  señala en su informe sobre el estado de la democracia en el mundo 2021 que “en 2020 el número de países que tendieron hacia el autoritarismo superó al número de países que avanzaron hacia la democracia.” Además, reconoce que la pandemia del covid-19 acentuó esta tendencia, la cual comenzó a desvelarse desde 2015. Y concluye que “desde el comienzo de la tercera ola de democratización en la década de 1970 no se registraba en el mundo un proceso de retroceso democrático tan extenso.”

En América Latina y el Caribe, el informe IDEA señala que la calidad de la democracia “continúa deteriorándose” y que la mayoría de los países de la región -grupo en el que se incluye Colombia junto con Argentina, México, Brasil, Chile y Perú entre otros- se encuentran estancados en un nivel de desempeño medio de sus democracias. Uruguay es el único país de la región cuya democracia muestra un nivel de desempeño alto. Además, llama la atención la situación de Brasil que “registra el mayor número de atributos en declive del mundo y desde 2016 está transitando un proceso de retroceso democrático.”

En su intervención, el presidente Biden enfatizó que la defensa de la democracia es también un asunto interno en Estados Unidos. Poniendo así por primera vez una cuota de autocrítica y reconocimiento de la gravedad de su propia situación y los efectos negativos que sobre la democracia estadounidense tuvo el periodo Trump. El cual, además de la polarización interna, llegó a poner en cuestión el propio proceso electoral y la sucesión del poder.

De las intervenciones de los distintos mandatarios vale mencionar algunos aspectos que contribuyen a caracterizar la reflexión: a) La heterogeneidad de las democracias según países y regiones. b) La convergencia sobre sus amenazas como la violación de los derechos humanos, la corrupción, la desigualdad y la pobreza. c) La conveniencia de una agenda común que va más allá de las elecciones libres, reafirmando la necesidad de fortalecer el dialogo social, la sociedad civil, las libertades, la solidaridad y el equilibrio de poderes. d) Establecer compromisos para recuperar las condiciones democráticas desde dentro de cada uno de los estados.

De otro lado, no faltó la polémica, sobre todo por los países no invitados como China y Rusia, y porque en opinión de algunos no se obtuvieron resultados concretos, previéndose para este efecto una segunda cumbre presencial para el próximo año. Sin embargo, lo más importante se logró: convocar un trabajo común para responder a los desafíos actuales de la democracia y desde adentro de cada uno de los estados. El camino no será fácil.

@Fer_GuzmanR